Corría el año 1998 y la gente no paraba de hablar de “El show de Truman”. Jim Carrey tenía todo para arrasar con los premios de la temporada sin embargo, para la ceremonia de los Oscar 1999 no tuvo la nominación que todos esperaban.
A pesar de esto, el actor sí fue invitado a la 71ª edición de los Premios de la Academia y hasta presentó el premio a “Mejor Montaje Cinematográfico”, el cual se llevó Michael Kahn por “Rescatando al Soldado Ryan”.
Durante su participación, Carrey hizo un monólogo en el que se ridiculizó a sí mismo por no haber obtenido ninguna nominación, diciendo que estaba ahí “sólo por la fiesta”.
“Buenas noches damas y caballeros estoy aquí para presentar el premio de la Academia por logro sobresaliente en edición de película...y eso es todo lo que vine a hacer. No tengo nada más de qué preocuparme. Sólo aparezco y me uno a la fiesta...”, dice Carrey.
El actor continúa su monólogo cuando comeinza a llorar por recordar que ni siqueira estaba nominado. “Lo siento, no esperaba que esto sucediera. Ganar el Oscar no es la cosa más importante del mundo. Es un honor sólo ser nomi....ay dios”.
Pero lejos de comenzar a reclamar o burlarse de alguno de los presentes, alabó a Roberto Benigni, quien aquel año arrasó con la gala al estar nominado en las categorías de Mejor Director, Mejor Actor (GANADOR), Mejor Guión y Mejor Película Extranjera (GANADOR) por “La Vida es Bella”.
“Es mi culpa, lo arruiné. Hace más o menos un mes pensaba que votar por mí mismo haría la diferencia, ya saben. Realmente tienen que salir y hablarle a la gente. Bueno de todos modos, ¡a quién le importa! Fui vencido por Roberto Benigni . Él está saltando a mi océano. ¡Bravo!”.
Cabe mencionar que “The Truman Show” ya había sido un gran éxito en taquilla y que ya se había llevado un Globo de Oro a mejor “Actor de Drama” por dicha cinta, sin embargo, nadie entenderá por qué no fue siquiera considerado a la nominación. Aquel año, la lista estuvo encabezada por Tom Hanks (Saving Private Ryan), Ian McKellen (Gods and Monsters), Nick Nolte (Affliction), Edward Norton (American History X) y Roberto Benigni (La Vita e Bella).
Con su monólogo, Carrey dejó clara una cosa: no se necesita humillar al otro para crear un buen contenido. El humor no significa incomodar ni de aprovecharse de la tragedia de alguien.
La reacción de Carrey a altercado de Will Smith
La reciente entrega de los Premios Oscar estuvo llena de escándalos, entre comentarios de mal gusto, bromas hirientes y un altercado entre Wil Smith y Jada Pinkett con Chris Rock. Esto dejó ver cómo la ceremonia se ha convertido en un espectáculo que sólo busca generar rating, sin importar caer en situaciones incómodas o que atenten con la dignidad de otros.
Es por ello que, a pesar de haberse alejado “de ese mundo”, Jim Carrey no dudó en dar su opinión al respecto.
El actor, que estaba siendo entrevistado por la película Sonic 2, aprovechó para enviar un contundente mensaje, asegurando sentirse “enfermo” de lo que se ha convertido Hollywood.
“Me da asco, y me dio asco la ovación que le dieron. En Hollywood son unos cobardes. Lo sentí como una indicación de que ya no es un club de gente cool”, empezó Carrey.
“Yo hubiera anunciado esta mañana que estaba demandando a Will por 200 millones de dólares porque ese video estará ahí para siempre, será omnipresente. Ese insulto va a durar mucho tiempo”, destacó el actor de “The Mask”.
Y agregó: “Si quieres grita desde las butacas y muestra tu desagrado, o di algo en Twitter, pero no tienes derecho de subirte al escenario y pegarle a alguien porque ha dicho algo que no te gusta”.
Carrey destacó que el altercado ensombreció el evento pues hizo que se perdiera la atención en los nominados y demás talentos.