Uno de los equipos más irregulares en lo que vamos de temporada dentro del Fútbol Profesional Colombiano es Independiente Santa Fe. Los cardenales no han tenido la mejor de sus temporadas, a pesar de permanecer dentro de los ocho y de estar más cerca de la punta que de salir del lote de clasificados. El problema, sin duda, trasciende más allá de la reciente gestión de Jorge Bava, quien ya perdió su primer partido y que no ha encontrado el equipo ideal para poder desarrollar su idea de juego de la mejor manera dentro de la cancha, haciendo que, por ahora, la rotación sea muy constante en el plantel.
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Los problemas vienen desde el año pasado, ya que en el mandato de Pablo Peirano, no se consiguieron títulos, y, por el contrario, se perdió una de las finales más dolorosas en la historia del equipo y se quedó eliminado del segundo semestre, de una manera bastante decepcionante, pues fueron los mejores del todos contra todos, pero pasó lo más temido, se desinflaron en plenos cuadrangulares, siendo uno de los causales de su despido, el cual alargaron hasta la eliminación de Copa Libertadores en manos de Deportes Iquique, lo que colmó la paciencia del hincha y que dilapidó todas las opciones del uruguayo en el león.
Eso sí, a pesar de que el presente no es el mejor, los directivos apuestan a comenzar a formar el futuro de la plantilla, por lo que en las últimas horas se conoció que el jugador Jacob Gómez Barreiro, de 16 años, firmó contrato con el equipo luego de ser goleador del Difútbol y de la Liga de Antioquia, siendo una de las mayores promesas de nuestro país en su posición y una apuesta grande por parte del equipo bogotano para sus divisiones menores y para el equipo profesional en unos años.