Uno de los problemas más grandes que ha tenido que afrontar la dirigencia de la Dimayor y la mayoría de presidentes de los equipos afiliados al Fútbol Profesional Colombiano son los pleitos entre barras bravas, mismo que han desencadenado en sanciones, problemas con la CONMEBOL, partidos aplazados, cancelados, perdidas de puntos, y en el peor de los casos, han dejado víctimas fatales que enlutan a toda la comunidad futbolera del país por la crueldad de los hechos y la increíble intolerancia solo por los colores de una u otra camiseta.
Y es que, a pesar de no ser algo nuevo, si se han intensificado los hechos de violencia en nuestro país durante los últimos meses, siendo dos de los casos más recordados la pelea de barras en el Atanasio Girardot entre hinchas del Junior y de Nacional, la cual dejó una invasión de campo y unas escenas grotescas que mancharon el desarrollo del campeonato colombiano en el 2024. Y la otra fue la final de la Copa BetPlay entre los verdolagas y el América de Cali, cuando los aficionados escarlatas no dejaron celebrar a su rival invadiendo la cancha y empleando armas de todo tipo para agredir a la fuerza pública.
Ahora, la última de ellas, fue la disputa entre hinchas del Junior de Barranquilla y del Cúcuta Deportivo en Tolú, la cual dejó una persona fallecida e hicieron que la Alcaldía de Sincelejo no dejara llevar a cabo el encuentro entre motilones y Jaguares de Córdoba: “Informamos a todos los hinchas, medios de comunicación, periodistas y opinión pública en general lo siguiente. La Alcaldía de la ciudad de Sincelejo, tomó la decisión de no permitir la realización del encuentro entre Jaguares fc y Cúcuta Deportivo, el de hoy 13 de abril, en el Estadio Arturo Cumplido de esa ciudad. Aclaramos, que, nuestro equipo se encontraba en Sincelejo desde el día anterior dando cumplimiento al reglamento del Torneo Betplay Dimayor, Informaremos de manera oportuna la reprogramación del encuentro”, escribió el Cúcuta Deportivo.