La futbolista suiza Alisha Lehmann y su pareja, el también jugador, el brasileño Douglas Luiz, fueron víctimas de un millonario robo en su lujosa residencia en Turín, Italia. El robo, que ocurrió el sábado 19 de octubre, mientras ambos se encontraban jugando para la Juventus, dejó pérdidas estimadas en 540.000 dólares, informó el Daily Star.
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Según informes de medios italianos, los ladrones aprovecharon la ausencia de los jugadores para irrumpir en la propiedad. Entre los objetos sustraídos se encuentran 11 relojes de alta gama y un collar de diamantes perteneciente a Lehmann, de 25 años. El suceso fue descubierto por Luiz, de 26 años, cuando regresó de su partido contra la Lazio y encontró la casa completamente revuelta.
Silencio en medio de la investigación
El robo se reportó alrededor de la 1:30 de la madrugada, momento en que la policía local y los equipos forenses acudieron a la propiedad para iniciar las investigaciones. Aunque aún no se ha identificado a los responsables, se presume que los ladrones tenían conocimiento de la agenda de ambos futbolistas, lo que facilitó el allanamiento.
El incidente ha sido un golpe duro para Lehmann y Luiz, quienes llegaron a la Juventus el pasado verano tras dejar el Aston Villa. La pareja, que ha compartido en redes sociales momentos felices juntos, se ha mantenido en silencio público sobre el robo mientras las autoridades continúan con las pesquisas.
Rostro de la desigualdad salarial
Alisha Lehmann ha sido una voz destacada en la lucha por la igualdad salarial en el fútbol. En una reciente entrevista, la futbolista expresó su frustración por las enormes diferencias salariales entre el fútbol masculino y femenino, haciendo referencia a su pareja Douglas Luiz, quien gana “cien veces más” que ella.
Lehmann destacó que, aunque ambos juegan en el mismo equipo y tienen responsabilidades similares, la brecha salarial sigue siendo abismal. “Es algo que me afecta por ser mujer. Hacemos el mismo trabajo, pero la compensación no es ni remotamente comparable”, señaló la jugadora suiza, quien sigue trabajando para visibilizar esta problemática en el deporte.
El robo en su hogar es solo un obstáculo más para Lehmann, quien sigue siendo un ejemplo de lucha tanto dentro como fuera del campo.