Richard Ríos, el jugador de Palmeiras de Brasil y de la Selección Colombia, no se dejó cuestionar de parte de una aficionada que públicamente lo quiso reprochar por sus decisiones personales al querer ponerlo como alguien que influencia a las nuevas generaciones.
PUBLICIDAD
El centrocampista se ha convertido en uno de los grandes referentes de la nueva generación en la Tricolor y muchos ojos están sobre él, incluso, algunas van más allá y se lo quieren poner de ejemplo a sus hijos.
Así fue el caso de una de sus seguidoras en las redes sociales que le cuestionó el pintarse el cabello y tener tatuajes. Incluso, la mujer le pidió que hiciera una campaña de ‘prevención’ en contra de pintarse el cabello y tatuarse, dirigida a los adolescentes.
A Richard Ríos no le gusta que lo pongan de ejemplo a seguir
Fue luego de una publicación del futbolista en Instagram en la que se observa su tatuaje de la espalda que una usuaria salió con el inesperado pedido que dejó respuestas de todo tipo.
Vea también: A jugador del Tolima lo expulsaron por poner la cara y recibir un codazo del rival
“Por favor eres un buen futbolista pero piensa en la nueva generación, estás influenciando a los menores de edad que te admiran para pintar su cabello y tatuarse, sería bueno que hicieras una campaña de prevención y mencionar en tus publicaciones para los adolescentes que esperen su mayoría de edad para tomar la decisión de tatuarse y pintarse el cabello por favor”, señaló la mujer.
Lo extraño del mensaje fue tal que el propio Richard Ríos le respondió a su comentario, dejando claro que él no es ningún influenciador y que en casa es que tienen que hablar esas situaciones con los jóvenes para inculcarles los valores.
PUBLICIDAD
“@cindymestreg yo no influencio a nadie los valores y las influencias vienen desde la casa, por sus padres ! Yo simplemente soy un futbolista , no influencer!”, sentenció el futbolista.
Dicha respuesta de Richard Ríos ha hecho enorme eco al no dejarse reprochar por el solo hecho de pintarse el cabello o usar tatuajes, dejando claro que si alguien no quiere que los jóvenes lo hagan, el mejor ejemplo empieza en casa.
