“Cada quien carga su propia cruz”, esta fue una frase de Egan Bernal, que representa a la perfección la vida de estas futbolistas, guerreras, valientes y esforzadas, que ahora están a punto de representar a nuestro país en el Mundial Femenino de Fútbol de amputados.
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De hecho, es la primera vez que se va a llevar a cabo una Copa del Mundo de este deporte, con la participación de doce países: Colombia, Haití, Inglaterra, Ecuador, Camerún, Brasil, Estados Unidos, Ucrania, Polonia, Perú, Nigeria y Kenya, que se celebrará del 2 al 11 de noviembre en Barranquilla.
El presidente de la Federación Colombiana de Fútbol de amputados, Édgar Blanco Acevedo, quien también es vicepresidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol de amputados, no ocultó su emoción por tener el Mundial en nuestro país:
“Este Mundial Femenino es un gran reto para nosotros, y esperamos que sirva para masificar el fútbol de amputados en Colombia y en el mundo. El torneo será una voz para enviar un poderoso mensaje a la población con discapacidad y al mundo entero: no existen límites, y debemos enfocarnos en las capacidades infinitas por encima de cualquier discapacidad”.
Asímismo, Blanco resaltó la importancia que ha tenido la Fundación CIREC en el apoyo, no solamente del Mundial, sino del talento al que le han apostado en las diferentes categorías de este deporte, sin olvidarse del valor que han demostrado las mujeres que integran la Selección Colombia:
“Estamos profundamente agradecidos con la Fundación CIREC por aceptar ser el patrocinador oficial de este histórico torneo y de la selección de fútbol de amputados en la categoría femenina, masculina y en el semillero infantil. Las mujeres que participan en esta copa son verdaderas guerreras, y es crucial que se sientan valoradas, respetadas y respaldadas en todo momento”.
También habló Daniel Gómez, Director de la Fundación CIREC, quien además de confirmar que apoyarán a los deportistas el ámbito económico, dio a conocer que también lo harán con asistencia integral relacionada con rehabilitación, prótesis y dispositivos de movilidad:
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“Nuestro objetivo es que nuestras deportistas de la modalidad de fútbol de amputados puedan llegar aún más lejos. Queremos inspirar a otras organizaciones para que se sumen a esta causa donando para que las deportistas puedan dedicarse a este proyecto deportivo como medio de vida”,
En Publimetro Colombia conocimos el testimonio de tres esforzadas deportistas que estarán en la justa orbital y son Jennifer Coronado, de 20 años, Johana Neira, de 32 años, y Karen Herreño, de 23 años.
La historia de resiliencia y superación de las tres tiene un factor común y es tanto su deseo por salir adelante, como su amor por el fútbol.
Jennifer, oriunda de Capitanejo, Santander, estudiante de psicología, quien siempre fue fanática del balompié, perdió su pierna derecha en 2021. Sin embargo, eso no fue impedimento para ella, pues siguió luchando hasta convertirse en la lateral izquierda de la Selección Colombia de Fútbol de amputados:
“Para mí, el fútbol es lo más grande que puede haber en el fútbol, volvi a sentirme útil en la sociedad. Es un sueño hecho realidad, desde pequeña juego fútbol y siempre soñé ser Selección Colombia. El camino de Dios es tan perfecto que sucedió de esta manera”.
Algo similar sucedió con Johana, quien tuvo un accidente laboral y también perdió una pierna, pero siempre se mantuvo fuerte, así que encontró rápidamente un equipo de fútbol donde ha podido vivir grandes momentos de su vida al lado de personas que entienden su situación:
“En el momento en que perdí mi pierna, vi por redes sociales que iban a sacar un equipo de fútbol de amputados femenino, empecé a buscar si existía tal deporte porque no es muy reconocido en Colombia. Me di cuenta que en Bogotá practicaban unos muchachos, el equipo se llama gladiadores y ya llevo año y medio. Jugar fútbol con bastón se complica mucho, se requiere de mucha disciplina para practicar el pegue al balón. La discapacidad está en la mente. Convivir con personas con la misma situación de nosotros, nos hace sentirnos más útiles ante la sociedad y asimismo ayudarles”.
Finalmente, Karen Herreño nos contó que nació en Santander, pero tuvo que mudarse a Bogotá por temas de grupos armados. Ella perdió su pierna cuando tenía apenas 12 años durante un paseo escolar, pero nunca bajó los brazos y actualmente es profesional en administración de empresas, aunque lo que más le gusta hacer es defender la portería y así se ganó el puesto en la Selección Colombia de amputados:
“Esta experiencia es muy gratificante para mí, me gusta muchísimo, el hecho de defender el arco, ver a mis compañeras cómo mueven sus bastones, cómo se hacen los pases, cómo son estratégicas, cómo patean el balón. Demuestra que no solamente eres un ser humano sin una pierna o sin un brazo o alguna condición física diferente, sino que puedes demostrar tus capacidades, lo que eres capaz de hacer, tu fortaleza y disciplina”.
Karen hizo una apuesta prometedora y aseguró que nuestro país se puede ilusionar con el título porque hay mucho talento:
Sé que vamos a ganar el Mundial porque tenemos el equipo, mis compañeras son muy buenas jugadoras, se entienden entre sí y las expectativas son muy grandes.
