En estos Juegos Olímpicos de París 2024 hay un nombre que se ha destacado, aunque no del todo por las razones correctas. Se trata de Imane Khelif, la boxeadora argelina en la categoría de -66 kilos que se volvió el foco de la atención luego de derrotar a la italiana Angela Carini, en un combate que duró 46 segundos.
PUBLICIDAD
La contundente victoria de Khelif, sin embargo, no tuvo la celebración que merecía, pues se desató una ola de comentarios y cuestionamientos por parte de los observadores, incluyendo perfiles como Donald Trump, Elon Musk, y Giorgia Meloni, que pusieron en tela de juicio la aptitud de Khelif para estar compitiendo en la categoría basándose en su sexo y la veracidad del mismo con respecto a su apariencia.
No ayudó el hecho de que se conociera, momentos después, que la púgil había sido descalificada en el pasado en otro torneo por tener “altos niveles de testosterona”; un dato que sirvió para que se desencadenaran debates y ataques en redes sociales en contra de Khelif y las personas trans— una comunidad a la que Khelif no pertenece pues es biológicamente mujer.
¿Qué respondió Imane Khelif ante la ola de ataques que ha recibido en París 2024?
Luego de haber avanzado a semifinal de boxeo, donde enfrentará este martes a Suwannapheng, Khelif concedió una entrevista a SNTV en la que explicó cómo ha vivido todo lo sucedido.
“Envío un mensaje a todos los pueblos del mundo para que respeten los principios olímpicos y la Carta Olímpica, para que se abstengan de acosar a los atletas, porque esto tiene consecuencias, consecuencias enormes. Puede destruir a las personas, dividirlas, enfrentarlas. Y por eso pido que se abstengan de hacerlo”, señaló.
Khelif quiso dejar claro que ella acudió a París con el objetivo de luchar por una medalla, algo que ha ya cumplido. Reconoció haber sufrido por su familia. “Estoy en contacto con ellos dos días a la semana. Espero que no se hayan visto demasiado afectados”, dijo.
La boxeadora quiso agradecer también el apoyo recibido por parte del Comité Olímpico Internacional, que a través de su presidente Thomas Bach, quiso zanjar la polémica desde el primer momento. “Es una mujer”, sentenció Bach en rueda de prensa.
“Sé que el Comité Olímpico me ha hecho justicia y estoy contenta porque demuestra la verdad”, sentenció la mujer de 25 años.
