La selección Colombia afrontó con gran jerarquía la tercera fecha de las Eliminatorias al Mundial 2026 y ante su gente derrotó a un combinado de Uruguay que llegó con toda la ilusión de conseguir los tres puntos. Como ya suele ser costumbre, el primer tiempo de la ‘Lorenzoneta’ no estuvo ni cerca de ser bueno, pese a que se fue con la ventaja de un gol y los ánimos por el cielo.
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Durante los cinco primeros minutos, la selección Colombia se mostró muy insegura y la mayoría de jugadores estaban imprecisos con sus pases, al punto que en un par de ocasiones la defensa se vio desdibujada y Camilo Vargas se tuvo que hacer héroe.
De hecho, solo habían pasado 7 minutos del partido cuando el guardameta recibió la tarjeta amarilla ante el mano a mano en el que la defensa lo dejó con Darwin Núñez. Vargas salió a cortar la jugada y estuvo a punto de tocar la pelota con la mano, pero logró diluir la jugada, aunque no sin cometer una infracción sobre el delantero del Liverpool, por lo cual el árbitro decidió amonestarlo.
Aunque parecía que terminaría el primer tiempo con un pálido empate sin goles, apareció James Rodríguez para ponerle el pecho al partido con una habilitación a Santiago Arias, quien le devolvió el favor al ‘10′, quien sacó toda su clase para mandarla a guardar: Con su pierna derecha realizó su control dirigido hacia la izquierda y desenvainó tremendo balonazo que dejó sin ninguna posibilidad al guardameta del Junior, Santiago Mele, tanto que desató las lágrimas del capitán.
La alegría duró poco al ingresar al segundo tiempo, pues una desconcentración defensiva le permitió a Mathías Olivera poner el empate parcial tras un doble cabezazo en el área.
Solo cinco minutos después volvió a aparecer Matheus Uribe para convertir el parcial 2-1 en medio de la polémica: Un nuevo centro de Santiago Arias le pegó en la humanidad de James y muchos se quedaron pidiendo mano, pero el árbitro dejó jugar y el criticado mediocampista la acomodó donde no llega ningún portero.
Aunque muchos consideraron que no podía ser válido el gol por la mano, hay un par de reglas que le pueden dar la razón al árbitro:
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- “La mano accidental que lleve a un compañero a marcar un gol o a tener una oportunidad de gol ya no se considerará una infracción”.
- Será infracción cuando toque el balón con su mano/brazo, cuando ha agrandado su cuerpo de forma no natural”.
De todas maneras, el partido continuó con múltiples ocasiones para la selección Colombia: James Rodríguez estrelló un balón en el palo con su pierna derecha, Jhon Arias hizo lo propio en el travesaño tras picar la pelota por encima de Santiago Mele e incluso Luis Díaz desaprovechó un contragolpe en el que quedó mano a mano y la mandó ‘a las nubes’.
Néstor Lorenzo le metió mano al equipo y al minuto 67 le dio descanso a Matheus Uribe para darle la oportunidad de debutar al apetecido Richard Ríos. Ya sobre el minuto 80 sacó a Santos Borré y a James Rodríguez por Luis Sinisterra y Jorge Carrascal para lo que se pensaba sería un cierre de trámite.
Cuando parecía que sería una victoria tranquila para la selección Colombia, llegó una jugada en que nuevamente Darwin Nuñez quedó frente a Camilo Vargas, quien se aproximó a cortarlo y terminó cometiendo un inocente penal que también le desencadenó en la expulsión por doble amarilla. Para reemplazarlo entró el portero de Millonarios, Álvaro Montero, quien ingresó en lugar de Jhon Arias y pese a su estatura, no se pudo estirar lo suficiente para evitar el tanto del uruguayo, pese a que adivinó el lado donde disparó el jugador rival.
Al final añadieron cinco minutos más y Yerson Mosquera entró en sustitución de Santiago Arias, pero nada fue suficiente para conseguir un tercer gol que le diera los tres puntos a la selección Colombia.
Con este resultado, la ‘Tricolor’ completó nueve años sin derrotar al combinado de Uruguay desde aquella mítica vez que lo consiguieron en el Mundial de Brasil 2014.
