La violencia no para en el fútbol, infortunadamente. No se trata de un problema únicamente en Colombia, sino que en las mejores ligas ocurre lo mismo. Los festejos alocados en Nápoles, tras lograr el título de Serie A, conllevó a que se registren centenares de heridos y un muerto.
Y así pasa siempre. Va más allá de ser un problema de Manizales, Medellín, Ibagué u otra plaza. Así ha pasado en territorio español, a pocos minutos de jugarse la finalísima de la Copa del Rey entre el Real Madrid y Osasuna este sábado, en el Estadio La Cartuja de Sevilla.
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Disturbios antes de la final
Desde tempranas horas de la mañana, los hinchas de Real Madrid y Osasuna han concurrido en las calles de Sevilla. Infortunadamente, algunos desadaptados se han cruzado para alterar el orden público y desatar actos violentos.
Se han subido videos a través de las redes sociales, en donde se relata qué ocurría en algunas parques y calles. Varios aficionados se lanzaban de todo: sillas, cervezas, golpes, entre otros reprochables gestos.
Cabe anotar que ambos equipos tendrán como prioridad el ansiado trofeo: por un lado, el Real Madrid quiere pasar la página tras su complejo panorama en Liga, mientras que Osasuna buscará levantar su primer título en dicha competición.
Dicho partido se jugará este sábado a partir de las 3:00 p.m. (hora de Colombia) en territorio sevillano. La final es de manera neutral; es decir, están ambas hinchadas en el recinto futbolero.
En cuanto al Madrid, después de la definición de Copa del Rey, jugarán en Champions League ante Manchester City por la ida de las semifinales. Una final anticipada, que se desarrollará el martes 9 de mayo a las 2:00 p.m. (hora de Colombia).
