Margarita Rosa de Francisco se ha caracterizado por escribir fuerte y directo contra personas poderosas del país. El pasado 10 de febrero, Margarita publicó su columna llamada «Dilema ético», en ella, la escritora hace contundentes señalamientos a Sarmiento Angulo, dueño del periódico en el que trabaja. En varios pasajes se refiere al banquero de la siguiente forma: «¿Cómo no pensar en personas más innombrables que «el innombrable», dueños de todo el país, que financian las campañas de presidentes como el que hoy nos gobierna?». También, hizo énfasis en: «¿Cómo no empezar a gritar que no es «el que diga Uribe», sino el que diga el más innombrable e intocable de todos, ese que alguna vez se ufanó de mandar a confeccionar leyes a su medida?». Todas y cada una de estas señalizaciones van dirigidas al Señor Sarmiento Angulo.
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Como era de esperarse, el escrito tuvo repercusión en todos lados, hasta el punto de que Luz Ángela Sarmiento, hija del banquero, protestó y rechazó en una carta. A continuación el texto.
«A Margarita Rosa
Por: Luz Ángela Sarmiento
Directiva de EL TIEMPO Casa Editorial
Los términos de la columna de Margarita Rosa de Francisco son tan injuriosos contra Luis Carlos Sarmiento Angulo, mi padre, y contra este periódico que ameritan una reflexión.
Ciertamente, no es la primera vez que algo así ha sucedido. En el 2012, el entonces columnista José Obdulio Gaviria escribió una columna “alegórica”, que ponía en entredicho el nombre y la honra de Sergio Jaramillo, en esa época alto comisionado para la Paz. Jaramillo, con justa razón, se quejó por la “simple y vulgar difamación”. La Dirección del periódico le pidió una rectificación a Gaviria que él se negó a dar, lo que resultó en su despido.
Y en el 2009, la hoy alcaldesa Claudia López se despachó contra los entonces dueños, y contra el periódico, acusándolos de falta de ética. EL TIEMPO se pronunció concluyendo, “La Dirección de este diario entiende su descalificación… como una carta de renuncia, que acepta de manera inmediata”.
Margarita Rosa expresa: “A pesar de que opinar en contra de ciertos temas en un medio “oficial” como este, no es recomendable…”. Medio “oficial”; “no es recomendable”. Palabras como estas transmiten ideas de confabulaciones y amenazas. Más justo sería que, en lugar de insinuaciones, ella se pronunciara con claridad y exactitud.
Esta columnista, no cuesta reconocerlo, es una pluma suprema. Margarita Rosa escribe como una diosa, con maravilloso estilo y magistral uso de figuras literarias, es un placer leerla. Declara, como solo ella sabe hacerlo, el Sturm und Drang que permea todos sus escritos. Se siente cínica ante toda forma de gobierno en este país desde los años 70 hasta nuestros días. Y anuncia que quiere “intervenir en la discusión pública”. Esa es su opinión, y tiene absoluto derecho a ella.
Pero es inaceptable cuando lanza falsas acusaciones contra mi padre, como “ese que algún día se ufanó de mandar confeccionar leyes a su medida”. Qué fácil es echar aspersiones al viento, hablar de “algún día” ¡sin tener que probar, o seriamente argumentar nada! O cuando habla del “monopolio abusivo del sistema bancario que él ha creado”. Eso tristemente solo demuestra una gran ignorancia de los componentes del sistema bancario en Colombia, de sus regulaciones y funcionamiento. Y cuando dice que “denuncian constantemente sus clientes por las redes”. Nuevamente, desconocimiento del sistema. Los clientes –ni los nuestros ni los de nadie– son prisioneros. Precisamente porque hay competencia, y muy buena, un cliente escoge a dónde lleva sus negocios.
Ese comentario de Margarita Rosa me recuerda cuando alguna influenciadora de Petro, el candidato por quien se ha pronunciado Margarita Rosa, arengó inflamatoriamente en las redes a que los clientes se salieran en masa del Grupo Aval, y eso nunca sucedió. Cada cual escoge a dónde lleva sus negocios.
Todo esto, Margarita Rosa, para decirte que seguirás siendo bienvenida en EL TIEMPO para expresarte libremente mientras estés dispuesta a respetar la honra y el nombre del resto de colombianos. Las difamaciones vulgares no serán toleradas nunca en este periódico.
Luz Ángela Sarmiento
Directiva El Tiempo Casa Editorial»
Todo este enrollo levantó suspicacias y varias personas están a favor de Margarita Rosa De Francisco, debido a la forma en que escribió su columna de opinión.