Lamentablemente, la pequeña al ingerir este aparato, le generó choques eléctricos y fuertes quemaduras después de ingresar por su esófago.
El hecho ocurrió en la localidad de Lubbock en Estados Unidos. La madre de la pequeña se percató de algo extraño cuando la menor de edad empezó a presentar una fuerte tos.
A causa de esto, la madre inmediatamente la llevó al hospital, donde fue atendida por un personal médico. Allí le realizaron una radiografía, la cual arrojó que la niña se había tragado una batería.
Según un informe por parte de los doctores, la ingesta de este aparato le generó choques eléctricos y fuertes quemaduras después de ingresar por su esófago.
El pediatra Thomas McGill; quien trató a Reese Smith en el centro médico University Medical Center, reveló que la membrana mucosa de la pequeña se había quemado «completamente negra, como si estuvieras asando un malvavisco».
La familia, la cual compartió el caso en una página de recaudación de fondos, no logra sobreponerse al peor dolor; que hasta el momento, están viviendo.
“Con el corazón roto… no mucho más que decir en este momento. He estado tratando de encontrar las palabras por un tiempo. Tengo que volver a casa. Mi mamá también volvió a casa. Pero nos faltaba un miembro de la familia», sentenciaron en Facebook.
