El fallo de la Procuraduría contra los patrulleros responsables de la muerte de Javier Ordóñez destacaron la gravedad de sus falsedades.
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Este martes, la Procuraduría General de la Nación sancionó a los patrulleros Harby Damián Rodríguez y Juan Camilo Lloreda. La sanción fue motivada por la responsabilidad de los patrulleros en la muerte de Javier Ordóñez el pasado 9 de septiembre. El hecho, que motivó los dos días de protesta contra la agresión policial, motivó una sanción de 20 años a los agentes.
Estos, según el Ministerio Público, habrían cometido varias irregularidades y mentiras para justificar la muerte de Javier Ordóñez. Entre estos estaría el informe que presentaron sobre lo ocurrido la noche del 8 y madrugada del 9 de septiembre.
En el informe, los agentes aseguraron que tuvieron que separar una riña de 8 personas, pero la Procuraduría no encontró registro de dicha riña. Además, en el informe se asegura que los acompañantes de Ordóñez trataron de atacar a Rodríguez mientras reducía al estudiante de derecho. Tampoco se encontró prueba de esta agresión, ni en testimonios ni en videos de cámaras de seguridad.
Además, aunque en el reporte no aparecen pruebas de disparos, Rodríguez reconoció que disparó un arma al piso. En la pierna de Ordóñez se encontraron esquirlas de bala que no contribuyeron a su muerte, según la necropsia.
Aunque Rodríguez aseguró que nunca golpeó a Ordóñez, los videos de seguridad del CAI Villa Luz muestran que el agente sostuvo al detenido mientras Lloreda «lo golpea indiscriminadamente». Rodríguez también aseguró que Javier Ordóñez nunca estuvo bajo su custodia, pero los videos demuestran que sí ocurrió.
Finalmente, Lloreda aseguró que el detenido se golpeó la cabeza en varias oportunidades. El informe forense indicó que las lesiones que causaron la muerte de Javier Ordóñez no fueron autoinflingidas, debido a la fuerza con las que se propinaron.
