A través de un comunicado, el Partido Farc anunció que adherirá al paro nacional convocado para el 21 de octubre y a la minga indígena, que espera llegar en los próximos días a Bogotá.
Según el documento, estas movilizaciones son el camino para salir de la indiferencia con relación a los asesinatos selectivos y las masacres en el territorio nacional.
Desde la firma del acuerdo de paz hace cuatro años, 234 excombatientes han sido asesinados. De esos, 146 crímenes se han cometido durante el gobierno de Iván Duque.
«Una convergencia de factores ha terminado uniendo en sus propósitos a la extrema derecha que hoy ocupa la Casa de Nariño con aquellos que traicionaron el acuerdo de paz, convirtiendo a los exguerrilleros en blanco de los odios y de intereses mezquinos de ambos extremos», dice el comunicado.
El asesinato más reciente de excombatientes ocurrió ayer en el Meta. Las víctimas fueron Jesús Monroy, líder del proceso de reincorporación en el departamento, y su escolta Alexánder Largo.
El pasado 22 de agosto, en una audiencia que realizó la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) para analizar los problemas de seguridad de los excombatientes, Monroy fue vocero.
Según el Partido Farc, estos asesinatos sistemáticos ocurren mientras el Gobierno nacional mantiene un silencio cómplice.
«Creemos que el mayor reto que tenemos quienes aspiramos a una nación en paz, democrática y con justicia social es despertar a esas mayorías indiferentes», añade el documento.
Partido Farc anuncia que se unirá al paro nacional y a la minga indígena
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