Más días, menos horas. Los cambios en el pico y placa incluirían una hora menos de restricción, pero empezar restricción los sábados para vehículos particulares.
A pagar por circular. La Alcaldía también plantea reactivar el pago para circular en horario de restricción y mantener los bicicarriles instalados durante la pandemia.
¿Desde cuándo? Las propuestas presentadas por la Secretaría de Movilidad empezarán a aplicar desde este martes.
Este viernes, la alcaldesa Claudia López anunció junto con la Secretaría de Movilidad una serie importante de cambios en el pico y placa. La medida, que había sido expandida durante la emergencia ambiental en febrero, fue suspendida desde el 19 de marzo. A lo largo de la emergencia del coronavirus no había sido reactivada, al considerarse que las restricciones de cuarentena eran suficientes.
Desde entonces, y como parte de la reactivación de la actividad económica en Bogotá, cada vez más personas han salido a sus trabajos. Esto, así como el cierre de varios carriles para la instalación de bicicarriles en algunas avenidas principales, ha causado monumentales trancones. La situación se ha hecho crítica en septiembre, con el fin de la cuarentena y su reemplazo por un aislamiento selectivo.
Esto causó que se hicieran llamados para volver a la restricción de tránsito. La alcaldesa Claudia López, en conjunto con el secretario de Movilidad, Nicolás Estupiñán, anunció el posible regreso de la restricción. Este será planteado a partir de la próxima semana en el borrador de dos decretos que se publicarán en la página de la Alcaldía para comentarios de la comunidad. Apenas estos decretos sean anunciados se daría el regreso de la restricción.
Cambios en el pico y placa
La propuesta que se presentará a los bogotanos para los cambios del pico y placa buscará ajustar los horarios. La medida podría aliviar los fuertes trancones que se viven en Bogotá los sábados, en especial en zonas comerciales. Además, buscaría reducir el número de vehículos que circula en estos días por las vías principales, que en muchos casos mantendrán sus bicicarriles (ver recuadro).
Para esto, la propuesta de López es aumentar la restricción para vehículos particulares a los días sábados. A cambio, se ajustaría el horario de la misma, para permitir que las personas que van a recoger sus hijos en carro a los colegios lo puedan hacer. La medida iría de 6:00 a 8:30 am y de 4:00 a 7:30 pm de lunes a sábado. Los vehículos públicos mantendrán sus restricciones. La medida, según la Secretaría de Movilidad, empezará a operar el 22 de septiembre.
Pague por circular
Con el regreso del pico y placa, también se reactivará el pago para ser eximido de la medida y circular en horarios de restricción. López resaltó que se buscará, además del pago ya conocido de 2’066.000 pesos semestrales, hacer que los beneficiarios de la propuesta tengan nuevas formas de apoyar de manera solidaria a la ciudad.
Con los cierres a causa de la pandemia, no se activarían medidas como la siembra de árboles. En su lugar, se presentaría una medida de donación a los programas de Bogotá Solidaria o un programa de reciclaje coordinado por la Uaesp. Aunque la mandataria rechazó esta última propuesta, advirtió que esta situación podría mantenerse a causa de la emergencia.
Más exenciones
Uno de los cambios en el pico y placa más importantes será el de exenciones a la medida. Los bogotanos, además del pago por circulación, podrán aplicar con nuevas propuestas. Actualmente están exentos los vehículos eléctricos, de transporte escolar, de personas con discapacidad y de seguridad, entre otros.
Las nuevas exenciones implicarían tres medidas. Una de estas, ya aprobada por el Concejo de Bogotá, será la exención a vehículos híbridos. La segunda permitirá circular a los vehículos que circulen con más de tres personas, para potenciar la ocupación eficiente de los automóviles particulares y disminuir la congestión en el servicio público.
La tercera, con el fin de mantener la movilidad de los trabajadores de la salud, permitiría a los automóviles de su propiedad circular libremente. Quedan varias dudas con respecto a estas exenciones, como la forma en la que podrían combinarse con el uso de cámaras de fotomulta en las principales vías.
Los bicicarriles se quedan
El impacto de los bicicarriles en el tráfico vehicular es claro: mientras la velocidad promedio en toda Bogotá aumentó un 9% respecto a febrero, en los 14 corredores principales se redujo un 8,7%. Esto incluye el impacto de los carriles para bicicletas en vías como la Avenida de las Américas, calle 13, Avenida 68 y Carrera Séptima.
Aún así, López destacó que bicicarriles como el criticado en la Carrera Séptima han permitido un marcado aumento en el número de viajes. Aseguró que estos espacios permiten a más bogotanos circular al mismo tiempo, e indicó que la mayoría de estos van a hacerse permanentes.
