La Secretaría Distrital de Ambiente (SDA) impuso recientemente cinco medidas preventivas de suspensión en algunos tramos de las obras que se adelantan en el humedal Jaboque, al encontrar, en una visita de control y verificación, que presuntamente estas no cumplen con los permisos ambientales.
Esta decisión se suma a la del pasado 4 de septiembre, en el humedal Tibabuyes (Juan Amarillo), donde la entidad impuso medidas de suspensión en algunos tramos de las obras.
Es importante recordar que, dichas adecuaciones vienen del gobierno de Enrique Peñalosa; su Alcaldía dio vía libre a la construcción de ciclorrutas, senderos peatonales, alamedas, plazoletas, luminarias y adoquinado en humedales de la capital, mediante la adecuación de los llamados ‘senderos ecológicos’. Desde entonces, ambientalistas y habitantes de los sectores aledaños a estos ecosistemas han librado una batalla anónima en nombre los humedales.
En esa medida, Ambiente resalta que estas obras “no representan la visión de ciudad proyectada por la alcaldesa Claudia López”, quien ha reiterado que durante su mandato no se permitirán obras que no tengan viabilidad ambiental. “Como autoridad ambiental la Secretaría de Ambiente ha sido respetuosa tanto de los pronunciamientos judiciales como de los de los órganos de control, además, por supuesto, de seguir el debido proceso. Los operativos realizados durante las últimas dos semanas han conducido al sellamiento de frentes de obra en ambos humedales. Continuaremos defendiendo el medio ambiente con absoluto respeto a la ley”, dijo la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia.
En la visita técnica, que se llevó a cabo este viernes 11 de septiembre en el Jaboque, se constató que algunas de las actividades que se vienen desarrollando están por fuera de lo establecido en los permisos otorgados; también se encontraron estructuras que no están incluidas en las resoluciones autorizadas. “Esta medida es temporal y permanecerá hasta que desaparezcan los hechos que dieron origen a estas imposiciones”, afirmó el director de Control Ambiental de la entidad, Camilo Rincón.
Tras este proceso de revisión y verificación, la Secretaría de Ambiente impuso los sellos de suspensión en los puntos detectados para que la empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (Eaab), que es la encargada de desarrollar las obras en el humedal Jaboque, detenga sus actividades de construcción.
¿Qué dice el Acueducto?
La Eaab se pronunció luego de conocerse la decisión de la SDA, resaltando que la empresa siempre será respetuosa de la autoridad ambiental y los organismos de control que les soliciten “revisiones, mejoras o actuaciones que busquen siempre, como único propósito, el beneficio de los ciudadanos y la protección del ecosistema”.
Igualmente, resaltó que la decisión del diseño de las obras y los materiales utilizados en los humedales, están soportados en “la generación de menores impactos para el ecosistema y también en la funcionalidad y durabilidad de las intervenciones”.
Las obras en el humedal Juan Amarillo presentan un porcentaje de avance del 64 % y en Jaboque del 38%. “La Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá dará cumplimiento a la política ambiental contenida en el actual Plan de Desarrollo Distrital, como una convencida de que esto permitirá reverdecer a Bogotá”, puntualizó la Eaab.
PyR Miguel Ángel Julio, antropólogo y experto en gestión ambiental de humedales
¿Cuál es la importancia del precedente del Distrito en el Jaboque?
Las medidas preventivas de suspensión de actividades en el humedal Jaboque impuestas por la Secretaria Distrital de Ambiente, representan un sensato proceder de la autoridad ambiental que, sin embargo, no garantiza la preservación del ecosistema.
En primer lugar, se trata solamente de medidas cautelares de carácter temporal que se enfocan solo a unos tramos de la obra y, en segundo lugar, tan pronto sean subsanadas las observaciones que las motivan y presentados los documentos respectivos por parte de la Empresa de Acueducto, las obras podrían reanudarse y de esta forma continuaría el gravísimo daño al humedal.
¿Cómo garantizar la preservación de estos ecosistemas?
Si bien es cierto, las obras fueron aprobadas por el gobierno de Peñalosa, no hay que llamarnos a engaños. Si en verdad la administración actual tiene la voluntad política de preservar este importante ecosistema y de cumplir con el pacto ambiental que suscribió en campaña, lo que se debe hacer es proceder con las acciones jurídicas a las que haya lugar, para detener las obras en su totalidad e iniciar el proceso de demolición de los avances de las mismas.
La alcaldesa Claudia López tiene la gran oportunidad de honrar su palabra, de actuar en correspondencia con el sentir de miles de ciudadanos que por décadas hemos defendido el humedal y de hacer realidad su propósito de “reverdecer a Bogotá”.
¿Cuáles son las afectaciones que estas obras traen a los humedales?
Si se llevan a cabo dichas obras, ocurrirá una fragmentación de las franjas bióticas que componen la zona anfibia del humedal, lo que traerá un daño irreparable pues se alteraría las dinámicas hídricas y de suelos establecidas entre periodos secos y de inundación. Esto afectará los procesos biológicos, biogeoquímicos y geomorfológicos que mantienen la integridad del ecosistema.
Lo anterior produce una pérdida de biodiversidad y una grave afectación de la estructura ecológica de la ciudad. Lo que significa un terrible daño ambiental para Bogotá con impactos negativos en nuestra capacidad para enfrentar la crisis climática.