Tras la jornada de este miércoles en la que miles de personas salieron a las calles de San Victorino, la Plaza de la Mariposa amaneció cerrada.
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Este miércoles, comerciantes formales e informales se arremolinaron en las calles del sector de San Victorino. El área comercial empezó a bullir de gente, a pesar de la cuarentena que impone todavía restricciones a la movilidad en Bogotá. Para evitar esto, la Alcaldía ordenó que se cerrara el sector.
Desde la madrugada de este jueves, cientos de vallas cierran todo el área entre la Avenida Jiménez y el Parque Tercer Milenio. El objetivo ostensible de la medida tomada por la administración de Claudia López es impedir el paso de vehículos. Pero también se busca controlar el acceso de personas al sector de San Victorino.
Así, en este espacio se instalaron retenes de policía. Solo podrán acceder al área de la Plaza de la Mariposa y a las bodegas personas a través de las excepciones contempladas por la ley.
La medida causó extremada molestia de los comerciantes, tanto formales como informales, que operan en San Victorino. Los comerciantes aseguraron a Noticias Caracol que salieron a las calles porque necesitan llevar dinero a sus hogares. Pidieron a la administración distrital que les permita habilitar sus ventas y evitar la quiebra.
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