La jugadita de Ernesto Macías le saldrá muy cara si las autoridades deciden investigarle. El último día de su Gobierno como presidente del Senado decidió hacerle una jugada antidemocrática al país.
El viernes y sábado fueron días muy polémicos para el senador del Centro Democrático, Ernesto Macías. El viernes, sin opinión de nadie decidió imponer una placa al senador Álvaro Uribe, algo que es ilegal.
La placa la instaló en el Senado y por esto podría ser investigado. Pero la perla de corona fue el sábado en plena instalación de las sesiones del Congreso.
Allí decidió sacar al presidente Iván Duque para que no escuchara a la oposición en su derecho democrático de réplica. Todo esto consagrado en la ley de oposición sancionada en 2018.
El chasco de dejar encendido el micrófono y decir que era la última jugadita que hacía en su mandato podría tener efectos jurídicos.
La jugadita de Ernesto Macías le saldrá muy cara, porque la Procuraduría debería iniciar una investigación en su contra por faltar a la Ley Quinta que establece entregar garantías para todos los sectores.
También, la Comisión de Ética podría abrir un expediente del caso y Macías podría ser suspendido como senador y además pagar multas millonarias, pues su censura causó problemas.
“Es que nos toca por obligación que ellos hablen después del Presidente, le pido a la Comisión que acompañe al Presidente y los saco de aquí. Eso no lo saben. Esa es mi última jugadita de Presidente (risas)”, dijo Macías, sin percatarse de que tenía abierto su micrófono.