Las canecas de glifosato habían sido rechazadas en 2012; los análisis mostraron que era más tóxico e inflamable que lo recomendado.
Una compra del Gobierno Nacional causó mucha indignación a los activistas medioambientales. En medio de la discusión sobre la fumigación aérea, la Policía Antinarcóticos compró 700 canecas de glifosato «Cúspide». Este herbicida ya había sido rechazado previamente debido a las deficiencias en su fabricación.
Según el diario El Espectador, este tipo de glifosato había sido vetado por el gobierno de Estados Unidos en 2012. «Según el análisis hecho por las autoridades estadounidenses en ese entonces, este producto no solo era más tóxico, inflamable y de consistencia irregular, sino que su etiqueta había sido alterada para mostrar que el herbicida cumplía con los estándares pedidos», dice el medio.
Las canecas de glifosato, importado por la empresa Talanu Chemical desde la China, fueron compradas en las últimas semanas. Según documentos publicados por el diario, la transacción fue firmada por el director de Antinarcóticos, mayor general Jorge Luis Ramírez. Además, la operación costó más de 3000 millones de pesos.
Esta información fue citada tanto por María Jimena Duzán como por María Isabel Rueda en sus columnas.