Una decena de activistas se concentró este viernes frente al centro Plaza Mayor de Medellín, donde se celebra la 49 Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), para pedir que cesen los asesinatos de líderes sociales colombianos y de exguerrilleros de las FARC.
Durante el acto, realizado en la Plazoleta Interamericana, los manifestantes se tendieron en el piso y se cubrieron con mantas blancas para simular ser víctimas de homicidio y exigir, con carteles con el mensaje «SOS nos están matando», medidas efectivas de protección a la vida.
El activista de derechos humanos José Luis Marín, conocido como «AquinoTicias», explicó a Efe que se trató de una performance para decir que «nada justifica el homicidio» y advertir que si la ciudadanía no se moviliza en defensa de la vida, continuarán los asesinatos.
Además, indicó que buscan denunciar la indiferencia del Estado y captar la atención de las delegaciones internacionales asistentes a la cita de la OEA sobre el hecho de que «más de 615 líderes sociales han sido asesinados» en el país desde la firma de la paz con las FARC, en noviembre de 2016.
«Queremos decir que la vida nos une y que nada justifica el homicidio. El Gobierno colombiano viene incumpliendo sistemáticamente el acuerdo de paz, incumpliendo en lo básico», afirmó.
Marín sostuvo que en el país incumplen al «no defender la vida de los excombatientes y no defender a los líderes sociales», además de realizar «ataques» a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
Según el activista, «más de 130 excombatientes de las FARC han sido asesinados» tras la firma del acuerdo, cifra con la que argumentó que el Gobierno del presidente Iván Duque se ha mostrado «incapaz de defender la vida».
El activista se refirió además al caso de María del Pilar Hurtado, una mujer de 34 años que fue asesinada a tiros hace una semana delante de uno de sus hijos pequeños en la localidad de Tierraalta, en el departamento de Córdoba, «un caso que conmocionó y que conmociona al país».
Los organizadores también alertaron por el aumento de los homicidios en Medellín durante este año, con carteles blancos y letras de color rojo con el mensaje «338 muertes en lo que va del año».
Un reciente informe de la ONG Instituto de Estudios sobre Paz y Desarrollo (Indepaz) y el movimiento político Marcha Patriótica, señaló que desde 2016 702 líderes sociales y más de 130 exguerrilleros de las FARC fueron asesinados.
