Miles de universitarios colombianos se manifestaron hoy en las calles de Bogotá y otras ciudades en un nuevo pulso con el Gobierno del presidente Iván Duque para reclamar más inversión en educación, demanda a la que se sumaron sindicatos, indígenas y otros sectores contrarios a la reforma tributaria.
Al igual que lo sucedido en otras jornadas de protesta, las manifestaciones de hoy colapsaron el tráfico en la capital y degeneraron en disturbios que sin embargo no alcanzaron la magnitud de semanas anteriores y que fueron repelidos por la Policía.
El presidente Duque, que ayer cumplió sus primeros 100 días en el cargo, se ha visto enfrentado a multitudinarias protestas por la crisis de las universidades públicas que, según expertos, tienen un déficit de 18 billones de pesos (unos 5.642 millones de dólares).
De ese monto, de 3,2 billones de pesos (unos 1.000 millones de dólares) son para gastos de funcionamiento, y cerca de 15 billones de pesos (unos 4.700 millones de dólares) se requiere para mejorar las infraestructuras de las 32 universidades públicas del país.
Este jueves, nuevamente miles de jóvenes recorrieron calles y avenidas de ciudades como Bogotá, Cali, Medellín y Barranquilla, entre otras, con pancartas para manifestar su rechazo a lo que consideran «la muerte de la universidad pública».
A pesar de que el pasado 26 de octubre Duque y los rectores universitarios llegaron a un acuerdo por el cual se incrementarán gradualmente los recursos para el funcionamiento de la educación superior, los estudiantes consideran «insuficientes» los montos acordados y se niegan a volver a clases.
«Los estudiantes queremos reunirnos con el presidente Duque. Por eso decidimos hacer un reguetón por la educación», dijo hoy el presidente de la Asociación Colombiana de Representantes Estudiantiles de la Educación Superior, Alejandro Palacio.
De este modo, los jóvenes que empezaron a utilizar en Twitter el numeral #NoSoyEstudianteSoyMaluma, le reclamaron al mandatario el no haberlos recibido en la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo, pero sí tener tiempo para verse en los últimos días con los cantantes Maluma, Carlos Vives, Jorge Celedón, Sebastián Yatra y Fonseca, con quienes incluso ha cantado en actos públicos.
Para presionar al Gobierno este jueves de nuevo alzaron su voz miles de muchachos que se dieron cita en la calle 100 de Bogotá, una de las principales arterias de la ciudad.
«Yo no soy cantante, soy estudiante pero quiero reunirme con usted señor presidente», se leía en varias pancartas con las que marcharon los jóvenes.
La jornada, que empezó en horas de la mañana de forma pacífica, se tornó violenta hacia las 18.00 hora local (23.00 GMT) cuando los estudiantes obstaculizaron el tráfico de los autobuses del servicio de transporte masivo Transmilenio y se enfrentaron con la Policía.
Algunos de los estudiantes con las caras cubiertas pintaron las estaciones del Transmilenio con mensajes obscenos y burlas al Gobierno, mientras que otros se instalaron en el carril exclusivo de los autobuses, impidieron la circulación de los vehículos y lanzaron piedras contra la Policía.
Las unidades del Escuadrón Móvil Antidisturbios de la Policía (Esmad) fueron enviadas a los lugares de mayor concentración de manifestantes y se enfrentaron con ellos.
Con varios vídeos y fotografías publicadas en redes sociales los estudiantes denunciaron haber sido agredidos.
A la protesta de hoy se unieron otros sectores sociales que también protestan por el «abandono estatal».
De este modo, a los estudiantes se sumaron la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la Confederación General del Trabajo (CGT) y la Confederación de Trabajadores de Colombia (CTC), entre otros, que están en contra de la reforma tributaria, llamada «Ley de Financiamiento», radicada el pasado 31 de octubre ante el Congreso.
Los integrantes de estos sindicatos se reunieron esta tarde en la céntrica Plaza de Bolívar para exigir al Gobierno que retire la iniciativa de gravar con el IVA del 19 % a la mayoría de productos de la cesta básica.
«Son 480 indígenas marchando en Bogotá. Se unen en una sola voz para la defensa de la educación superior y para que el Gobierno se siente con los estudiantes y solucionen el problema de la educación en el país», indicó por su parte Julián Báez, representante estudiantil del movimiento indígena.
En la noche de este jueves los jóvenes y demás manifestantes seguían concentrados en algunos puntos de Bogotá a la espera de ser convocados por el Gobierno.