La casa de Adolfo Enrique Arrieta García, el presunto asesino de una niña de nueve años en Fundación, fue destruida por la comunidad enfurecida durante este fin de semana.
Los vecinos del sector sacaron a la calle los enseres que allí había y les prendieron fuego, al igual que a un camión tipo turbo que estaba en el garaje. Además destruyeron puertas, techo y ventanas de la residencia de propiedad del hombre que se dedicaba a conductor.
Al implicado se le imputó el cargo por el delito de feminicidio agravado, por el que deberá afrontar una pena de más de 50 años de cárcel, dijo una fuente allegada al despacho judicial al diario El Informador de Santa Marta.
Antes de ser presentado en audiencia, este fue sometido a exámenes médicos por parte de especialista del Instituto de Medicina Legal de esta ciudad, para determinar su estado mental.