Los hechos ocurrieron en una playa de Teután, en Marruecos.
En las imágenes, que le están dando la vuelta al mundo, se ve a un hombre jugar con un pequeño y enseñarle a manejar la moto acuática.
Ambos lucen felices y todo concurre con normalidad hasta que, de un momento a otro, el motor de la moto explota haciendo que esta se rompa en pedazos.
Por suerte el hombre y el niño salieron ilesos, pero no cabe duda de que se llevaron el susto de sus vidas.