El mandatario colombiano, Iván Duque, reiteró hoy que la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) debe liberar a los secuestrados en su poder y mostrar voluntad de paz para continuar con los diálogos en La Habana.
«Si el ELN tiene voluntad de paz, lo digo y lo reitero, si tienen voluntad de desmovilización, desarme y reinserción estoy listo para que podamos iniciar una conversación, pero tiene que ser sobre la base de la liberación de los secuestrados», aseveró Duque en una entrevista con la emisora Caracol Radio.
El jefe de Estado señaló que si esa organización no los libera es «muy complicado» continuar con los diálogos, que se realizan en La Habana, y agregó que no va a legitimar el secuestro, porque se repetirían «errores históricos».
Detalló que el Ministerio de Defensa está adelantando todos los protocolos para la liberación de las víctimas, aunque, afirmó, el ELN cambia de decisión cada día y resaltó que el Gobierno «no está negociando con secuestrados».
Por su parte, la guerrilla invitó el viernes pasado al Gobierno de Duque a «solucionar las diferencias» y dijo estar dispuesta a desarrollar de «manera inmediata» las operaciones de liberación de las 19 personas a las que mantiene secuestradas, la mayoría militares y policías.
El pasado 3 de agosto el ELN secuestró en el departamento de Chocó (noroeste) al intendente Wilber Rentería, el subintendente Luis Carlos Torres Montoya y el patrullero Yemilson Leandro Gómez Correa, de la Policía; el soldado profesional Jesús Alberto Ramírez Silva y dos civiles cuyos nombres no fueron suministrados.
Seis días después secuestró a los soldados Orlando Yair Vega Díaz, Juan Pablo Rojas Ovando y Eduardo Caro Bañol en el departamento de Arauca, fronterizo con Venezuela, y posteriormente publicó un vídeo como prueba de vida de esos militares.
El Gobierno de Juan Manuel Santos comenzó, en febrero de 2017, conversaciones de paz en Quito, que fueron trasladadas a La Habana en mayo de este año, después de que el presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, retirara a su país como garante y sede del proceso de paz.