Noticias

Un mundo reciclable: la gran apuesta de esta empresa con proyección social

Un mundo reciclable: la gran apuesta de esta empresa con proyección social

Andrés José Paz Arboleda, oriundo de Popayán, es el CEO de esta compañía que mensualmente recicla al mes 180 toneladas de plástico. Tras ser procesadas, con el material elaboran diferentes productos y piezas que sirven de solución en sectores como la construcción, en áreas urbanas y rurales. Con ello no solo se aprovecha el plástico (que puede tardar entre 100 y dos mil años en degradarse) sino que se desincentiva la tala ilegal de madera.

Pero su proyecto también tiene muy en cuenta a los recicladores, elementos preciados porque en realidad son la base de la cadena del reciclaje en las ciudades.

“Lo que intentamos es formalizar una práctica que es muy informal”, dice Andrés Paz. A lo largo de ocho años no solo se ha tomado la tarea de entender cómo se hace un buen reciclaje, sino también las dinámicas sociales de quienes están involucrados en un primer nivel de la cadena. Por tanto, identificaron varios focos de reciclaje en la ciudad y han logrado organizar varios grupos a los que han capacitado en buenas prácticas de separación de los materiales y les compran directamente. “Si tu logras organizarlos y motivarlos económicamente y les explicas la manera adecuada de reciclar (porque hay mucha basura) estamos haciendo una labor muy importante para el planeta”, comenta Paz. Actualmente hay cerca de 200 familias de recicladores que giran alrededor de los dos centros de acopio que tiene Intera en Bogotá.

Y es que ser sumamente cuidadoso en la labor de reciclar es muy importante. No se trata solo de reutilizar sino de hacer que estos elementos puedan ser nuevamente reciclables. Mezclar los elementos es algo que es completamente prohibido en su operación porque no solo deteriora la calidad del producto, sino porque se vuelve basura. Al juntarse los elementos se genera un producto contaminado que jamás podrá volver a ser utilizada como materia prima.

Entre los materiales que más recogen y hacen el grueso de las 180 toneladas que procesan se encuentra el Tereftalato de polietileno (botellas de agua y gaseosa transparentes), polietilenos (tarros de champú, de limpiadores) y polipropilenos (tapas y tanques como los de la gasolina). Todos tienen propiedades químicas diferentes por lo que hay que procesarlas por aparte. “No se puede poner basura en el mercado”, explica Paz.

Una de sus líneas de productos se llama ‘Re-Inventa y trasforma’. “Es la más compleja, pero para mí es el futuro. Uno quisiera que las personas aprendieran a usar el plástico. Si usamos tablas de madera para la cama, ¿por qué no pueden ser de plástico reciclado? Si las paredes de una vivienda rural o de una escuela son de madera, ¿por qué no pueden ser de plástico?”, se pregunta Andrés Paz. La idea es crear soluciones de la mano de sus clientes. De hecho, ya han tenido proyectos en los que han entregado salones hechos con eslabones de este material que han creado en su fábrica.

“Con los plásticos puede hacer lo que se quiera, esa es la realidad. Hay tecnología de por medio, pero toso es posible, lo único que se necesita es visión”.

Más de Dos mil toneladas de plástico reciclado y procesado, han hecho que Intera sea merecedora de certificaciones de gestión ambiental y responsabilidad social empresarial.

 

Frase:

“Hoy en día estamos en uno de los eslabones que es transformar las materias primas, pero si no hay política pública que realmente impulse eso es muy difícil… la tarea es titánica en ese sentido, pero muy sustentable si está bien hecha”. Andrés José Paz Arboleda.

Dato:

Austria procesa el 90 por ciento de los materiales plásticos que desecha y Holanda hasta hace carreteras en este material reciclado.

 

 

Síguenos en Google News:Google News

Contenido Patrocinado

Lo Último