El cabecilla del frente Héroes y Mártires de la guerrilla colombiana Ejército de Liberación Nacional (ELN), alias «Arturo», fue abatido en una operación conjunta del Ejército y la Policía efectuada en el departamento de Boyacá (centro), informó el ministro de Defensa colombiano Luis Carlos Villegas.
La operación en la que murió el jefe guerrillero, al que medios locales identifican como Harvey Alberto Franco Holguín, tuvo lugar en el caserío Altamira del municipio de Pisba.
«Con la neutralización de alias ‘Arturo’ o ‘Pingpong’ se debilita cada vez más el accionar delictivo» del ELN, escribió el ministro Villegas en Twitter.
El jefe guerrillero, que estuvo 22 años en las filas del ELN, «estaba involucrado directamente en el asesinato de más de 30 miembros de la fuerza pública» ocurrido en octubre de 2015 en la población boyacense de Güicán, agregó el ministro Villegas.
«Arturo» es responsable de varios ataques a infraestructura petrolera en Arauca y Casanare.
El frente Héroes y Mártires es una unidad móvil del ELN que se desplaza por los departamentos de Boyacá y Arauca.
La muerte de alias «Arturo» ocurrió cuando el ELN manifestó su disposición de reanudar los diálogos de paz con el Gobierno colombiano, suspendidos desde el pasado 10 de enero por la escalada de violencia de esa guerrilla tras concluir un cese el fuego de 100 días.
En ese sentido, la guerrilla sostiene que está dispuesta a una reunión entre el jefe negociador del Gobierno colombiano, Gustavo Bell, y el dirigente del ELN Pablo Beltrán para retomar los diálogos en Quito.
El secretario general de la ONU, António Guterres, que estuvo de visita en Colombia los días 13 y 14 de este mes, exhortó al Gobierno y al ELN a reanudar los diálogos que quedaron suspendidos tras la ofensiva terrorista de esa guerrilla al concluir el alto el fuego bilateral.
Las delegaciones del Gobierno y el ELN debían haber reanudado el pasado 9 de enero en la capital ecuatoriana las conversaciones de paz que comenzaron el año pasado.
Sin embargo, el proceso sufrió un impase luego de que la guerrilla perpetrara una decena de atentados tras el fin del cese el fuego de 100 días.