Con un desenlace insólito e inexplicable, así podría calificarse la muerte de Wilmer Alfonso Cuéllar, de 51 años, quien falleció después de sufrir un golpe en la cabeza, en el andén de una casa vecina del barrio Alfonso López en Barranquilla.
De acuerdo con la información de su pareja Maura Vitola, el hombre venía de festejar el cumpleaños de uno de su hijos.
Relató que, Cuéllar, salió de su casa a las 9 de la noche de este sábado para felicitar a su hijo y posteriormente se dirigió a la casa de su cuñada.
«Él después se encontró con un amigo y se fueron para el barrio El Carmen. Allá también llegó su hijo y se tomaron varios tragos», expresó Vitola la portal Zona Cero.
Luego de compartir con ellos, Wilmer se dispuso a regresar caminando solo a su casa a eso de las 2 de la mañana, con la mala fortuna de que, al momento, de intentar subir el muro del andén de la vivienda de al lado de su casa, perdió el equilibro y cayó de espalda golpeándose la cabeza.
«Él que se da cuenta es un vecino que, al ver a un hombre tirado bien cambiado, lo fue a auxiliar y se dio cuenta que era Wilmer y me avisó de inmediato», contó la mujer.
Agregó que un principio, ella pensó que su pareja estaba borracha y por eso estaba en el suelo. Sin embargo, el vecino le señaló que Cuéllar tenía una herida en su cabeza.
«Lo llevamos a Salud Total de la Cordialidad. Allá empezó a vomitar y se le colocó la lengua morada. Intentaron reanimarlo, pero falleció», señaló Vitola.
Agregó que su pareja era pensionado de la Policía, entidad con la que trabajó 17 años.
Añadió que tuvo tres hijos y era conocido como una persona amigable, que jugaba mucho fútbol.
Respecto al hijo de Cuéllar, quien estaba de cumpleaños, indicó que se derrumbó con la noticia de su papá. «Él está destrozado porque cogió por otro camino en madrugada», finalizó.
