Una noticia por parte de el Gobierno alertó sobre a erradicación de 62% de las hectáreas de cultivos ilícitos que quedaron fijas para este año.
“Los casi 8000 soldados, policías y civiles que están al servicio de esta campaña de erradicación forzosa de los cultivos ilícitos han reportado ya el cumplimiento de 62% de la meta de 50.000 hectáreas para erradicar en este 2017”, afirmó el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas
El ministro añadió que el resultado se ha conseguido en el 66% del tiempo, “es decir, estamos con un alta probabilidad de cumplir nuestra meta en el tiempo previsto”.
Por su parte, el vicepresidente Óscar Naranjo recordó que la lucha de Colombia contra los cultivos ilícitos “tiene dos componentes que hacen parte de una única estrategia: la erradicación forzosa y la sustitución voluntaria de cultivos”.
Naranjo añadió que después de 30 años de lucha contra las drogas, por primera vez Colombia tiene una estrategia integral porque “sin conflicto con las Farc” el país tiene hoy “la gran oportunidad no solamente de erradicar sino de solucionar definitivamente el problema”.
El balance coincide con la declaración que el secretario adjunto de Estado de EE.UU. para Seguridad y Lucha Antinarcóticos, William Brownfield, dio ante una comisión del Senado de ese país, donde dijo creer que el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, descuidó la lucha contra el narcotráfico para lograr un acuerdo de paz con las Farc que fue firmado en noviembre pasado.
A esa actitud atribuyó Brownfield el aumento de la producción de cocaína que, según la Casa Blanca, alcanzó el año pasado un potencial de 710 toneladas métricas, mientras que los cultivos ilícitos de coca subieron hasta una cifra récord de 188.000 hectáreas.
Villegas, por su parte destacó que los “resultados muy importantes en materia de interdicción” por el decomiso de 275 toneladas de cocaína pura este año, lo que supone “un incremento de dos dígitos frente al año anterior”, cuando los decomisos alcanzaron un récord de 362 toneladas, según cifras divulgadas el mes pasado.
“De esta manera estamos cumpliendo con una de las estrategias que se ha impuesto el presidente para esta política antidrogas en Colombia”.
En lo que tiene que ver con la sustitución voluntaria, Pardo afirmó que a ese programa se han incorporado alrededor de 105.000 familias que dicen cultivar 70.000 hectáreas y que al finalizar esta año o a comienzos del próximo se puede alcanzar “la meta de 50.000 hectáreas en el proceso de sustitución”.
“Detrás de esos cultivos no solamente hay familias cocaleras sino que también se mueven intereses de narcotraficantes y por esa razón, en una combinación de erradicación forzosa contra esos cultivadores mafiosos y erradicación voluntaria de esas familias campesinas, avanzamos en la meta final de (…) tener 100.000 hectáreas ya eliminadas en los próximos meses”, dijo Naranjo.
