Mañana empezaría el desmonte de los taxímetros en la capital colombiana y lo que a muchos usuarios les parece una maravilla, para un gran sector de los taxistas no es más que un negocio sucio entre la Alcaldía Mayor y la Secretaría de Movilidad con una empresa que manejaría la aplicación digital que se usaría para que empiece a funcionar el nuevo sistema en los taxis de la ciudad.
El anuncio del secretario de Movilidad, Juan Pablo Bocarejo, de que “al taxi en Bogotá le llegó la hora de cambiar” y las nuevas tarifas con las que funcionarán ‘los amarillos’, se convirtió en lo que podríamos llamar una especie de monopolio, del que habrá un solo beneficiado. Aunque Bocarejo advirtió que todas las empresas de taxis podrían desarrollar sus aplicativos móviles para entrar en la onda de la tecnología y dar ese paso adelante en el tiempo que pide la administración distrital, en realidad pareciera un simple formalismo, que terminaría beneficiando solo a unos.
El decreto, que está próximo a salir al aire, asegura que las empresas de taxis podrán cobrar las nuevas tarifas, solo si se encuentran afiliadas a una plataforma tecnológica que ofrezca lo que busca el Distrito: seguridad, confort, precios justos, y en general, un mejor servicio; pero que además tenga el aval del Ministerio de Transporte, porque sin este ninguna plataforma será aceptada para prestar el servicio en las calles bogotanas, lo cual ha tomado por sorpresa a la mayoría del gremio de los taxistas.
PUBLIMETRO habló con Hugo Ospina, vocero y dueño de taxis, quien explicó que la implementación del taxímetro digital le parece un caso de corrupción “a nivel de Odebrecht”, primero, porque lo charlado con la Secretaría de Movilidad nunca fue sobre el desmonte del taxímetro para el servicio básico de taxis y segundo, porque nunca se les dijo a los empresarios que debían contar con una aplicación tecnológica habilitada por MinTransporte. Y así lo demuestra la resolución 2163 de 2016, en la que se estipula que las aplicaciones deben ser avaladas si lo que les interesa es prestar un servicio de lujo, no el estándar que hoy se usa en Bogotá.
“Por esto es que aplicaciones como Tappsi, Easy Taxi, Smart Taxi y un sinnúmero de plataformas nunca corrieron a habilitarse, ¡porque no se necesitaba!. ¡Oh sorpresa!, resulta que apenas se habilita esta empresa, entonces ahí sí dicen que se necesita el aval. Me parece que este decreto de tarifas está direccionado a beneficiar económicamente a una sola persona y obligar a los más de 55.000 taxis que queremos implementar el aumento de tarifas, a acudir a esta empresa”, señaló Ospina.
Red amarilla, el único aplicativo con permisos
¿Cuál es la empresa y quiénes serían los beneficiarios a los que alude Ospina? El 30 de enero de 2017 el Ministerio de Transporte expidió la resolución 144 en la que la plataforma Red Amarilla quedó habilitada “para la atención del servicio de transporte público individual en el nivel de lujo” y servicio básico, como expresa el documento.
Hasta el momento, la única empresa que tiene aplicación avalada por el MinTransporte es Cotech S.A., dueña de Red Amarilla, el único aplicativo que , hasta el momento, sería implementado en los taxis de la ciudad, por lo menos hasta que otros como Nekso, de Hugo Ospina, o Tappsi, se habiliten, lo que podría demorar hasta cuatro meses si todo el papeleo se encuentra en regla.
“Nosotros no nos oponemos a la tecnología. Nosotros ya contamos con una aplicación con todos los requisitos. Lo que no nos parece decente es que nos digan que teníamos que estar habilitados. Si nos hubieran dicho hace seis u ocho meses, desde que salió la resolución nos habríamos habilitado, pero la jugada del señor secretario fue maestra”, señala Ospina.
Taxis Libres estaría detrás de “la jugada maestra”
Los que sí están conformes y de acuerdo con el anuncio del Gobierno Distrital son los voceros de Taxis Libres. ¿Por qué? Sencillo: Red Amarilla vendría siendo la aplicación oficial de esta empresa. César Claudio Hernández es tío paterno de la hoy gerente de Taxis Libres, Stefanía Hernández e íntimo compañero de negocios de Uldarico Peña, a quien en 2015 se le señaló por presuntamente “regalar” $100.000 a quien votara por Enrique Peñalosa, hoy alcalde Bogotá.
“Este cambio que se dará de manera progresiva en la ciudad, permitirá a los usuarios tener una mayor tranquilidad en relación con el pago del servicio, lo que se traduce en más comodidad y seguridad para los pasajeros. Por esta razón, Taxis Libres Bogotá apoya su implementación, recordando que la compañía viene impulsando estrategias para brindar un servicio de mayor calidad a los bogotanos, como lo son los talleres de inducción y capacitación para los conductores y controles que se realizan periódicamente en la empresa, entre otras medidas”, aseguró Taxis Libres a PUBLIMETRO.
Claro. Y es que si la Alcaldía Mayor de Bogotá expide el decreto que aún no se sabe cuándo entrará en vigencia, los únicos taxistas que podrán gozar con el aumento de tarifas serán los afiliados a Taxis Libres o a Red Amarilla, dejando a aplicaciones como Easy Taxi, Tappsi, Smart Taxi y muchas más, por fuera del negocio.
En este caso, los taxistas que quieran acceder a los beneficios tendrían que: o esperar y tramitar su propio aplicativo y pasar el papeleo para que el Ministerio de Transporte lo habilite o afiliarse al que esté habilitado –es decir Red Amarilla–, lo que posiblemente traería un costo para quienes quieran hacer parte, de esta plataforma, algo que sería, a muchas luces, el establecimiento de un monopolio amparado por el Distrito.
El papel del Distrito
Pero, ¿por qué la Alcaldía y la Secretaría de Movilidad decidirían implementar tan intempestivamente una medida cuando solo existe una aplicación que cumple los requisitos necesarios?
Para Hugo Ospina, este es un caso de corrupción.
“Esto es un Odebrecht y un acto de corrupción, probablemente del señor Secretario de Movilidad y del alcalde Enrique Peñalosa. Dirigirle un negocio a un tercero con ayuda de un decreto, desprestigiando al gremio, como lo ha hecho el alcalde al afirmar que todos los taxistas de la ciudad tienen ‘muñeco’ en el taxímetro, es ser indecente como mandatario. Por esto, el gremio de taxistas a nivel nacional, para la llegada del papa está preparando un gran cese de actividades. Estamos instando a los taxistas del país a que lleguen a la capital para decirles a este alcalde y secretario que son unos corruptos que quieren masacrar al gremio favoreciendo a un tercero”, señaló.
PUBLIMETRO preguntó a la Secretaría de Movilidad sobre si tenían idea de cuál sería la aplicación que funcionaría desde mañana en los taxis de la ciudad y desde el departamento de prensa aseguran que como no está firmado un decreto aún, no se sabe cuál será. A eso le sumamos que cuando les informamos sobre las denuncias de Hugo Ospina no respondieron, hasta el momento de la publicación de este artículo.
Las dudas persisten
Sobre este tema nos quedan algunos interrogantes: ¿la Alcaldía y la Secretaría de Movilidad están al tanto de que Red Amarilla es la única aplicación con el permiso del Ministerio de Transporte para empezar a circular?, ¿cómo Red Amarilla supo que debía acreditarse ante el Ministerio de Transporte, si sobre el papel no era necesario que lo hiciera para el servicio básico?, ¿lo sabían de antemano? Si es así, ¿por qué darle ventaja a un tercero de por lo menos tres meses para que el aumento de tarifas sea para su beneficio exclusivo?, ¿no sería injusto, no solo con los taxistas que no se encuentran afiliados a Red Amarilla, sino con los usuarios que tendrían que limitarse a pedir y facturar su servicio de taxi (sea de lujo o no) por medio de una única aplicación, sin oportunidad de escoger otra?
PUBLIMETRO intentó contactar a los representantes de Red Amarilla y no fue posible.
Quedamos a la espera del decreto que firme el alcalde para aclarar estas dudas que afectan tanto al gremio de ‘los amarillos’ como a los ciudadanos.
¿Quién es César Claudio Hernández?
El hombre que hoy tendría el poder de poner a circular a los taxis bogotanos con las nuevas tarifas, gracias a su aplicación Red Amarilla es, según fuentes, hermano de José Eduardo Hernández, socio fundador de Taxis Libres, quien toma las decisiones de la empresa de transporte.
César Hernández es quien figura como dueño de Corpotaxis DC, de Cotech S.A. y un viejo conocido de Uldarico Peña, la cara de los taxistas hasta enero de 2017.
Hernández sería el tío paterno de Stefanía Hernández, hoy gerente de Taxis Libres y principal beneficiada con la medida.
¿Hay algún nexo entre Taxis Libres y el Distrito?
En octubre del 2015 una polémica se suscitó por la filtración de un video en el que Uldarico Peña, entonces gerente de Taxis Libres, “regalaba” 100.000 pesos a quienes aseguraran que votarían por Enrique Peñalosa.
Muchas fueron las personas que afirmaron que Peña “coaccionaba” a sus conductores para votar por Peñalosa porque era la opción más benéfica para el gremio.
Sin embargo, Peña aseguró que aunque sí tenía afinidad por Peñalosa, nunca intentó sobornar a sus conductores y que lo filtrado en el video era un malentendido.
El cambio de las tarifas
Según Juan Pablo Bocarejo, secretario de Movilidad, las tarifas tendrán un aumento de 7,4% con respecto a las vigentes, para los taxis que empiecen a circular con la plataforma virtual y eliminen el taxímetro:
• La tarifa mínima pasará de $4100 a $4400.
• El recargo nocturno, dominical y/o festivo pasará de $2000 a $2100.
• El servicio ‘puerta a puerta’ pasará de $700 a $800.
• El recargo desde y hacia el Aeropuerto El Dorado y Puente Aéreo pasará de $4100 a $4400.
• El conocido ‘banderazo’ pasará de $2300 a $2500.