Los familiares de los ocho jóvenes detenidos, por ser los supuestos autores del atentado en el Centro Andino, han tenido que acostumbrarse a verlos rápidamente en el complejo judicial de Paloquemao.
Desde el 24 de junio, día en el que fueron capturados por la Fiscalía General de la Nación y la Policía Nacional, la escena ha sido la misma. Un uniformado lleva esposado a su familiar y en algunas ocasiones logran abrazarlo o decirle algunas palabras de aliento.
Los cargos por los que acusan a los ocho jóvenes detenidos son concierto para delinquir, terrorismo, homicidio, secuestro simple y hurto calificado y agravado. Igualmente, la Fiscalía los acusa de pertenecer al autodenominado Movimiento Revolucionario del Pueblo (MRP). Sin embargo, en las vallas de metal que protegen el complejo judicial de Paloquemao se pueden leer graffitis como “No más falsos positivos judiciales”.
En algunas audiencias, los familiares le han pasado cartas a sus familiares. En esta ocasión, la detenida Lizeth Rodríguez Zárate les envió una nota en la que afirmaba que “el trato y acción de las instituciones expresa su talante injusto, no solo nos acusan sin razones fundamentadas, sino que además nos criminalizan con seudónimos racistas. A Iván lo llamaron “Talibán”, tal vez para justificar su ilegal aprehensión”.
Lizeth se refiere a Iván Ramírez, quien fue acusado de ser uno de los autores del atentado, pero posteriormente fue liberado.
La hermana de Lizeth Rodríguez, Camila Rodríguez, habló con Publimetro sobre la captura de su familiar.
Según Camila, “mi hermana, desde la institucionalidad se ha encargado de defender los derechos humanos. Actualmente, hace parte de un grupo de investigación de la Universidad Nacional”.
Frente a las capturas, Camila considera que “todas tienen un común denominador. Los implicados son activistas y estudiantes de la Universidad Nacional. Así, pareciera que en este país pensar diferente fuera un delito”.
“Es sumamente indignante que el Estado colombiano la acuse de terrorista. Igualmente, muchos medios de comunicación caen en este mismo error. Además, es incorrecto que se utilicen estos apelativos antes de que se hubiera comenzado un juicio formal”, asegura Camila.
Así mismo, Camila y toda su familia consideran que “hay una clara manipulación de por parte de la Fiscalía. Hay una filtración de información que rechazamos rotundamente porque las autoridades están generando presión para que la juez tome una decisión determinada. Creemos que esas pruebas no son concluyentes ni contundentes. Por esto, no las aceptamos”.
Ante esta situación tan difícil, la Universidad Nacional “ha brindado un apoyo muy importante. Tanto los estudiantes como los directivos han enviado comunicados porque a muchos les ha golpeado el estigma que se ha generado de la institución.
Igualmente, en ruedas de prensa posteriores, varias de las víctimas contarán con más detalles los momentos de captura de sus familiares porque estos hechos son elementos probatorios que todavía no pueden ser revelados a la opinión pública. Por la misma razón, se explicarán con posterioridad las actividades que los implicados estaban realizando el sábado 17 de junio, cuando se presentó el atentado contra el Centro Andino.
A medida que avancen las audiencias en contra de Lizeth Rodríguez y los otros siete detenidos se conocerán las pruebas que tiene la Fiscalía en contra de los supuestos culpables.
“Nos hemos visto de paso, la hemos saludado y nos hemos dado cuenta que está bien. Está tranquila porque el que nada debe, nada teme”, asegura Camila.