Las horas pasaron después de la tragedia que enluta nuevamente al país. Manizales enfrentó las primeras noches tras las avalanchas y el deslizamiento de parte de una montaña que provocó, hasta el momento, la muerte de 18 personas y que 6 más se encuentren desaparecidas.
Ayer en la madrugada, una tormenta eléctrica y torrenciales aguaceros volvieron a encender las alertas máximas en la capital caldense por nuevos deslizamientos y la en diferentes puntos de la ciudad.
Una vivienda colapsó por el deslizamiento en el barrio Camilo Torres, según afirmó el alcalde Octavio Cardona quien se dirigió al punto de la emergencia con dos carros de bomberos que socorrieron a una mujer y a su bebé que se encontraban en peligro, pero que afortunadamente salieron ilesas de la emergencia invernal que afronta el departamento de Caldas.
Las nuevas emergencias propiciaron la evacuación de tres sectores de manera preventiva, entre ellos otra zona del barrio Aranjuez, uno de los más perjudicados por los hechos del pasado miércoles en donde murieron tres de sus pobladores tras la caída de parte del cerro Sancancio.
Por ahora, la capital caldense permanece en alerta roja y sin suministro de agua en once barrios y por ahora los niños no volverán a clases, según la Secretaría de Educación.
La ministra de Vivienda, Elsa Noguera, y el director del Departamento Nacional de Planeación, Simón Gaviria, visitaron las áreas afectadas “para evaluar las inversiones necesarias por parte del Gobierno para la reconstrucción”.
¿Cómo ayudar a Manizales?
El Gobierno ha movilizado ayudas de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo para Manizales: 500 mercados, colchonetas y frazadas.
La Cruz Roja Nacional designó la cuenta de ahorros número 639124940, del banco BBVA, para aportes de dinero que los colombianos quieran hacer a los damnificados y las personas que ahora duermen en albergues dispuestos por las autoridades para que las familias que perdieron sus casas o que necesitan ser reubicadas pasen la noche.