Un policía que estaba fuera de servicio reparó en los gritos de una pequeña de tres años a la que su padre le arrojó gasolina y le prendió fuego. La menor sufrió quemaduras en el 13 % de su cuerpo.
El padre de las menores, que fue puesto en prisión, admitió que sí quería matar a sus hijas, además de haber quemado a su hija menor, roció con gasolina a una menor de 7 años a la cual no pudo incinerar, pero no quiso aceptar los cargos en donde indicaban que estaba «como loco» cuando realizó la fatal acción. Según le dijo a la Corte Suprema de Australia Occidental, pasó todo el día fumando marihuana e ingiriendo alcohol.
Uno de los vecinos de la familia, le preguntó porqué había quemado a su pequeña hija y el hombre, mientras tomaba una cerveza en la cocina le dijo que porque era «muy bonita».
La mujer del hombre, confesó que el sujeto la intimidó con un cuchillo y la amenazó con que iba a quemar la casa. El hombre que había fumado marihuana y bebido, durante todo el día, le dijo a su esposa que «el hombre lobo» estaba llegando a la casa, y en un ataque de locura le dijo «así es, perra, te voy a matar».
Por ahora, el juicio continúa. el hombre tendrá que afrontar cargos por intento de homicidio en contra de sus hijas y en contra de un vecino, al cual le lanzó botellas y al cual intentó atacar con un cuchillo.