Cuando el techo de la sala de cine es el manto negro cargado de estrellas del cielo de nuestra Amazonía sabes que no sólo estás yendo a cine, estás viviendo algo especial. San José, la capital del departamento del Guaviare, tristemente famosa por la presencia de las Farc y la guerra entre esta guerrilla y los grupos paramilitares, tuvo la noche más especial de su joven historia el viernes pasado cuando se proyectó por primera vez una película.
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Ríos de gente se tomaron la plaza central de una ciudad de 60.000 habitantes en donde confluyen acentos y razas de otros orígenes, pero que tienen en común el sueño de hacer una vida en paz, de construir un futuro en la cálida San José. «Yo me vine acá en el 77 desde Chocó», cuenta Lorenzo Luango, de 67 años y uno de los ‘profes’ -como se denomina en el Guaviare a la población afrodescendiente que en su mayoría trabaja, precisamente, en los colegios de la región-, mientras sonríe recordando que lo primero que lo maravilló de esta nueva tierra era el pescado.
El ‘profe’ Lorenzo sí había ido a cine en otras ciudades, pero nunca había visto una película en su San José: «Esto es muy bonito, mire los niños, mire la alegría de la gente», dice sin perder de vista la pantalla. Porque el sueño de proyectar una película y disfrutar de una función de cine en el Guaviare, bajo una noche fresca que permitió que más de mil personas rieran, comieran palomitas de maíz y le dijeran por primera vez en su vida a alguien: «¡calle que no deja oír!», se dio gracias a que Cine Colombia decidió celebrar sus 90 años movilizando por todo el territorio nacional dos camiones especiales que transportan un proyector y una pantalla inflable que garantiza que la película que se ofrezca se disfrute en alta definición tanto de video como de audio.
La historia es casi poética: en 1927, en plena génesis del cine colombiano con los ya míticos hermanos Acevedo haciendo películas y los Di Doménico proyectándolas en diferentes ciudades del país, se estableció en Medellín la compañía Cine Colombia. Los Acevedo se asociarían con Cine Colombia en 1928 para realizar el primer noticiero de Colombia (el legendario Noticiero Cineco) y de nuevo con los Acevedo la empresa realizaría una serie de cubrimientos que cambiarían para siempre la historia de la cinematografía y la narrativa audiovisual nacional.
El cine se había establecido en el país, pero no todos podían disfrutarlo pues las salas se limitaban a las grandes ciudades y las proyecciones itinerantes cada vez dejaban de ser habituales. Lo irónico es que incluso hoy no todos los colombianos podemos disfrutar del plan de ir a ver una película de cine y por eso Cine Colombia quiso abrirles la puerta de la pantalla de los sueños a 90 poblaciones que nunca hubiesen tenido esa experiencia.
Sólo 58 de los 1.102 municipios de Colombia cuentan con escenarios para la proyección de cine, lo que hace que la gira de lo que Cine Colombia ha llamado «Ruta 90» sea un evento histórico para el país.
«Yo sí había ido a cine en Villavo, pero los pelados no y véalos, para ellos esto es muy bueno, están en la calle felices, sin pensar en maldades», dice Libardo mientras sus dos hijos de 12 y 9 años dan batalla para comprar palomitas de maíz en la única máquina móvil destinada para tal fin en la plaza de San José.
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«¡No calculamos que eso fuera a venir tanta gente!», dice afanada doña Elvira, la dueña de la mencionada máquina, mientras manda a su sobrina a comprar más maíz pira pues la segunda bolsa ya se acabó, la fila es larga y todos quieren crispetas para disfrutar las películas.
Fue una noche diferente. Una noche de paz. Una noche surreal. «Esto es lo mejor que le ha pasado a San José, con vainas como estas es que uno de verdad siente el proceso de paz… ¡cómo ha cambiado mi tierra!», señala sonriente Jorge Ibáñez, taxista de la región, mientras frente a sus ojos, y los de más de mil personas más, se desarrolla una escena que ningún cineasta habría imaginado: los indígenas tukano haciendo una danza ceremonial en la antesala de la proyección, justo al lado de una silleta de flores con el logo de Star Wars hecha por las artesanas locales.
La primera noche de cine en los 41 años de existencia de San José del Guaviare fue más que un doblete. Los niños rieron y cantaron con ‘Bailarina’, una película animada que hizo que más de una anciana suspirara maravillada, y todos terminaron aplaudiendo tras los 96 minutos de ‘El Paseo 4’, la película colombiana más taquillera de todos los tiempos. (Ver: 5 razones por las que los colombianos aman El Paseo 4).
Un evento multitudinario y gratuito, que reunió familias enteras, que hizo que se respirara paz en una ciudad históricamente castigada por la guerra, que llenó de carcajadas la noche de San José del Guaviare y de ilusiones las mentes de todos, dejó claro la veracidad de la frase de Fellini: «el cine es el lenguaje de los sueños».
Lo mejor es que la Ruta 90 sigue rumbo al norte; ya pasó por Icononzo (Tolima) y se dirige a Puerto Concordia, Puerto Lleras, Fuente de Oro y una larga lista de municipios, hasta que a final de año llegue al número 90 cuando el camión proyector parquee en Dibulla, en la Guajira, para demostrar que se puede hacer nación con el cine y que 90 años de soledad pueden llegar a su final en el mismo instante en que la luz blanca sobre la pantalla empieza a dibujar la siempre maravillosa historia de una película.
Datos de la ruta del cine gratis por Colombia
- Si bien diferentes colectivos culturales como Cinemaluna han realizado un gran trabajo llevando cine a diferentes regiones del país en los últimos años, esta es la primera vez que la principal distribuidora del país asume la tarea de recorrer el territorio nacional ofreciendo proyecciones en HD
- Cine Colombia espera beneficiar a más de 150.000 personas este año con las funciones gratuitas de «Ruta 90» a través de un recorrido de 8.000 kilómetros
- En total son 90 municipios a lo largo y ancho del país; en cada uno de ellos se realizarán cuatro funciones con diferentes películas que estén en la cartelera vigente.
Así fue la primera noche de cine en San José del Guaviare
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