El vicepresidente Tareck El Aissami reemplazaría al actual presidente de Venezuela si Nicolás Maduro fuera revocado en un referendo.
El Aissami era, hasta ahora, gobernador del céntrico estado Aragua y fue nombrado vicepresidente ejecutivo del país, cargo que ocupaba desde enero de 2016 Aristóbulo Istúriz.
«He designado como vicepresidente Ejecutivo de la República Bolivariana de Venezuela a Tareck El Aisammi para que asuma en 2017-2018», dijo Maduro en cadena obligatoria de radio y televisión de un acto presidencial.
El jefe de Estado encomendó al vicepresidente Tareck El Aissami ocuparse de la seguridad del país y luchar contra los «terroristas de la extrema derecha».
«Le he dicho métete de noche y de día, los dos juntos (con Maduro), y trabajar por la seguridad del pueblo, la paz, la lucha por depurar las policías regionales y nacionales, la lucha contra los terroristas de la extrema derecha. Terroristas, ríndanse, vamos por ustedes», dijo.
En ese sentido, Maduro agradeció a Istúriz por la labor que desempeñó en el cargo de la vicepresidencia durante el 2016, pues aseguró que cumplió una «extraordinaria tarea».
Istúriz «ha cumplido su misión de resistencia y batalla», y de ahora en adelante se desempeñará en nuevas labores, como nuevo ministro de Comunas.
Además de nombrar al vicepresidente Tareck El Aissami, Maduro también modificó parte de su gabinete, al cambiar a los jefes del Ministerio de Petróleo y fusionar los ministerios del área económica en un solo «poderoso» Ministerio de Economía y Finanzas.
El primero será presidido por Nelson Martínez, actual presidente de la filial de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), Citgo; mientras que el segundo tendrá a la cabeza a Ramón Lobo, quien hasta hoy se desempeñaba como parlamentario por el bloque chavista.
Por su parte, Eulogio Del Pino continúa como presidente de PDVSA.