La oficina de prensa del Vaticano explicó que la visita del pontífice argentino, de 80 años, a su predecesor de 89 años, se enmarca «en la sencillez de la relación cotidiana entre el Santo padre y el papa emérito».
Es tradicional que Francisco acuda antes de Navidad a felicitar a Benedicto XVI en la residencia en la que vive desde su renuncia en febrero de 2013 con cuatro laicas consagradas de la comunidad «Memores Domini».
El pasado 17 de diciembre, Joseph Ratiznger mandó un mensaje escrito de felicitación a Francisco por su 80 cumpleaños y posteriormente, por la tarde, le llamó personalmente por teléfono.
Además Benedicto XVI, de 89 años, le hizo llegar «tres pequeños regalos», no desvelados por el Vaticano pero de alto contenido «simbólico» para el papa argentino.