Sin embargo, su gestión en este ministerio estuvo empañado por varios hechos o críticas que le hicieron algunos sectores y que generaron una gran polémica en el país.
Cartillas sexuales
Tal vez este fue el hecho más sonado y el que causó mayor indignación en el país por unas cartillas falsas que circularon en redes y que tenían imágenes pornográficas. Además, sus contradictores aseguraron que con dichas cartillas la ministra buscaba imponer un enfoque de orientación sexual inclusivo en los manuales de convivencia en los colegios.
Según sus críticos, ese material promovía la «ideología de género» y tergiversaba la sexualidad al afirmar, por ejemplo, que no se nace con un sexo determinado sino que eso se decide a lo largo de la vida.
Ante la polémica formada, el presidente Santos, después de reunirse con la jerarquía de la iglesia Católica, anunció que las cartillas (las reales, no las que aparecieron en redes) no habían sido y no serían autorizadas.
Derrota del sí en el plebiscito
La funcionaria, que cumplió dos años en el cargo, pidió el pasado 30 de agosto una licencia de un mes para reforzar la campaña por el sí en el plebiscito sobre el acuerdo de paz.
Sin embargo, su trabajo no fue tan notorio como las campañas promovidas por otros grupos.
Su relación homosexual
A causa de la polémica por las cartillas, la ministra fue sometida a un debate de control político en el que aseguró que en el fondo, la protesta se hacía por odio e intolerancia hacia ella por declararse abiertamente homosexual y hacer pública su relación con Cecilia Álvarez.
‘Ser pilo paga’
Aunque este fue el programa bandera de su ministerio, a los pocos días de su lanzamiento recibió varias críticas porque muchos de los estudiantes beneficiarios revelaron errores en la implementación, como que el Gobierno no les consignó a tiempo el dinero para poder viajar a la ciudad en la que empezarían sus estudios.
Este martes, en las declaraciones que Parody entregó no explicó las razones de su renuncia, pero sí destacó sus mayores logros, como que más de 500.000 estudiantes pueden asistir actualmente al colegio ocho horas diarias.
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