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Centenares de personas sin techo se enfrentaron a las unidades antidisturbios de la Policía en pleno centro de Bogotá tras el desalojo ayer del sector conocido como el «Bronx» en el que vivían.
Los indigentes se habían situado en la céntrica Plaza de España, una de las zonas más deprimidas de la capital colombiana, tras ser desalojados del «Bronx» cuando comenzaron a asaltar comercios e incendiaron los árboles que hay en la zona.
Algunos de ellos, incluso lanzaron piedras y bombas molotov al Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía, que se enfrentó a ellos para recuperar el control de la zona.
La Policía desarrolló ayer un gran operativo para desalojar el «Bronx», una zona rodeada de comercios y que sirve de refugio para indigentes, que es considerada como una de las más peligrosas de Bogotá.
Allí abunda el tráfico de drogas y la prostitución de menores. En el operativo participaron 2.500 soldados y policías y fueron rescatados al menos 76 menores que eran forzados a practicar la prostitución en la zona.
Las autoridades registraron inmuebles en los que, según medios locales, se celebraban «fiestas» en las que participaban durante varios días menores de edad, muchos de los cuales se prostituían a cambio de drogas.
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El alcalde Enrique Peñalosa, señaló tras la operación que no se puede «seguir tolerando una república independiente del crimen, donde hay explotación de niños, en ninguna parte de la ciudad, pero menos aún a seis cuadras de la Casa de Nariño» y de la Alcaldía.
Entre los diferentes hallazgos de las autoridades, el secretario de Seguridad de Bogotá, Daniel Mejía, informó que encontraron un túnel en una vivienda que comunica con una bodega.
Por ese túnel, los delincuentes transportaban droga, armas y personas sin ser descubiertos por la Policía.
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