Los capitalinos tuvieron que vivir grandes trancones y, en algunos casos, agresiones por parte de los conductores de taxis amarillos, debido al para que se realizó ayer en Bogotá.
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Incluso, los taxistas que decidieron no protestar y trabajar normalmente, fueron víctimas de sus compañeros, quienes les pincharon las llantas, les lanzaron piedras y los bajaron, junto con sus pasajeros, de los carros.
Tras los bloqueos y enfrentamientos, Freddy Contreras, uno de los líderes de los taxistas que convocó a la protesta, aseguró que la situación no fue responsabilidad del gremio.
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“Nos están echando la culpa a nosotros de los trancones y de todo, pero el Gobierno sabía que esto venía hace un mes. Entonces es culpa del Gobierno que no haya preparado una logística para lo que se veía venir”, dijo a Caracol Radio.
Además advirtió que el gremio seguirá con las movilizaciones en la ciudad y dijo que se sumarán al paro nacional convocado para el próximo jueves 17 de marzo.
Según la Policía de Tránsito, durante la jornada se impusieron 189 comparendos a conductores, 9 taxis fueron inmovilizados, y fueron capturadas 16 personas que ahora serían judicializadas por daño en bien ajeno y bloqueo de vías.
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