“Después de tanto esfuerzo, después de tanto tiempo, si no hemos llegado el 23 (de marzo) a un buen acuerdo, yo le digo a la contraparte: pongamos otra fecha, yo no voy a cumplir la fecha con un mal acuerdo. Yo cumplo y firmo lo que para los colombianos sea un buen acuerdo”. Presidente Juan Manuel Santos.
En el marco del anuncio del acuerdo de justicia transicional, que hace parte del punto de las víctimas, el 23 de septiembre del año pasado, Santos y el máximo jefe de la guerrilla FARC, Rodrigo Londoño, alias Timochenko, anunciaron desde La Habana la fecha máxima para llegar a un acuerdo que ponga fin a cinco décadas de conflicto armado en Colombia. Esa fecha es el próximo 23 de marzo.
Las especulaciones sobre que el próximo 23 de marzo no se firmará el fin del conflicto armado en Colombia se ven cada vez más cercanas a la realidad y los pronunciamientos que así lo daban a entender, tanto de miembros de las Farc como del Gobierno, están cerca de confirmarse.
Ya los ministros del Interior, Juan Fernando Cristo, y de Relaciones Exteriores, María Ángela Holguín habían allanado el terreno en ese sentido por el lado del Gobierno y ayer fue el mismísimo presidente Juan Manuel Santos el que dio a entender que ese día no se firmará la paz con las Farc.
Santos dijo este miércoles que no firmará un «mal acuerdo» con la guerrilla solo por cumplir con la fecha límite prevista por las partes el pasado 23 de septiembre, cuando se anunció el acuerdo en materia de justicia transicional.
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“Algo que sí quiero dejar en claro: Yo por cumplir con una fecha no voy a firmar un mal acuerdo”, declaró el presidente.
“Después de tanto esfuerzo, después de tanto tiempo, si no hemos llegado el 23 (de marzo) a un buen acuerdo, yo le digo a la contraparte: pongamos otra fecha, yo no voy a cumplir la fecha con un mal acuerdo. Yo cumplo y firmo lo que para los colombianos sea un buen acuerdo”, enfatizó el jefe de Estado.
La fecha establecida para firma de la paz se ha ido diluyendo debido a la complejidad de las negociaciones, que han entrado en la «recta final» después de más de tres años de acercamientos sostenidos en Cuba.
«Ojalá podamos firmar, como les digo, los negociadores están en el tramo final», añadió Santos.
¿Qué va a pasar?
Y si no se firma el acuerdo final el 23 de marzo, ¿qué pasará ese día? Con temas pendientes como el cese al fuego bilateral y definitivo y la dejación de armas, así como el cierre del punto de las víctimas y la implementación, verificación y refrendación de los acuerdos de paz, las partes se han comprometido a mostrar avances sustanciales ese día.
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Uno de los negociadores de las Farc, alias Carlos Antonio Lozada, dijo en días pasados que, precisamente, hay “avances significativos” en un tema en específico: el del cese de hostilidades.
Este punto, en el que desde hace meses trabaja la subcomisión técnica para la terminación del conflicto, es uno de los más importantes de cara al final de la confrontación armada entre las Farc y el Estado, por lo que, de no firmarse la paz, hacer un anuncio en ese sentido sería un muy buen ‘plan b’.
De hecho, los expertos coinciden en que , dado que los tiempos no alcanzan para firmar la paz el 23 de marzo, ese día se anunciará el cese al fuego bilateral y definitivo como una victoria del proceso de paz, de cara a la firma final.
Además, se aprovecharía la presencia del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que iniciará una visita oficial a Cuba el 22 de marzo, para que sirva de anfitrión, junto a Raúl Castro, del trascendental anuncio.
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