La teniente Vanessa Rojas asumió la responsabilidad de ser una de las instructoras de los participantes de Soldados 1.0, con el mismo compromiso que siempre ha hecho cada una de las tareas dentro del Ejército Nacional. Precisamente esa disciplina y el carácter que ha demostrado para realizar sus tareas en esta institución, la hicieron destacarse en la evaluación que realizó el Comando Superior, para escoger a los tres representantes del Ejército Nacional, en Soldados 1.0.
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Junto al capitán José Rojas y el cabo Edilberto Rubio, la teniente Vanessa Rojas, se preparó para recibir a los 20 famosos a los que les darían instrucción militar, con el fin de convertirlos en soldados de Colombia.
Pero la teniente Rojas, no sólo es la encargada de entrenar a las mujeres que hacen parte del grupo de famosos. Desde que aceptó ser parte de Soldados 1.0, también asumió la responsabilidad de representar a las mujeres que hacen parte del Ejército Nacional.
“A veces creen que, porque somos militares, perdemos la condición de mujeres. Eso no sucede. Nosotras somos militares, pero también tenemos familia, nos casamos, tenemos hijos, estamos pendientes del hogar, pero ante todo somos mujeres, nobles, femeninas y delicadas”, cuenta la teniente Vanessa Rojas, quien lleva cuatro años en el Ejército Nacional.
Hija de un Sargento Primero retirado, la teniente Rojas, siempre quiso hacer parte del Ejército, y en eso influyó mucho el ejemplo de su padre, de quien heredó el carácter y la disciplina militar. “Esto es una vocación, es una religión. Pasé toda mi infancia en casas fiscales, viviendo en batallones y viendo cómo era la vida de un militar. Esto es algo que siempre quise hacer”, cuenta la Teniente, quien sueña con continuar su vida militar hasta convertirse en Comandante de las Fuerzas Armadas de Colombia.
Pero, ¿Realmente ser soldado es tan duro como lo muestra el reality ‘Soldados 1.0’., de RCN? Pues sí. Cada uno de los colombianos que decide enlistarse en las filas del Ejército Nacional tiene que dejar de lado a su familia, sus amigos y una vida normal para enfrentarse a un nuevo reto cada día en el que la disciplina, el respeto y el amor por la patria y por la defensa de los colores de la bandera, priman.
Así lo asegura la teniente Vanessa Rojas, quien a propósito de la experiencia que está viviendo en Soldados 1.0, recuerda sus inicios en el Ejército Nacional. “Es completamente igual. En la Escuela Militar de Cadetes, hacemos lo mismo que los hombres. Son esas pruebas con instrucciones básicas y de esa manera va avanzando la exigencia. Al principio no sufrí tanto como les está pasando a los participantes de Soldados 1.0., porque a pesar de que sí es un cambio de vida, yo sabía qué significaba ser militar. Entonces no fue sufrimiento, sino que fue algo que yo quise hacer y quise vivir”, señala la teniente Rojas.
La vida de un soldado es diferente a la de otros colombianos. Levantarse muy temprano, antes de que cante el gallo y antes de que el sol se asome por el oriente. Los minutos para alistarse son mínimos. Para un soldado el tiempo vale oro.
Pasan varias horas del día, entrenando, y por el alto nivel de exigencia que tiene la preparación militar, otras disciplinas deportivas han involucrado este tipo de preparación para alcanzar mejores resultados. Para un soldado, ejercitar el cuerpo es sinónimo de entrenar la mente, el coraje y el valor para asumir los retos.
Si no está en batalla, un militar porta su uniforme con tal limpieza y con tal pulcritud, que pareciera brillar. Los valores que representan van de la mano con esta limpieza, pulcritud en la palabra, en sus actos y en su forma de ver al país, porque ser Soldados del Ejército Nacional, es un orgullo para cada uno de los miembros de esta Institución.
“Yo los invito a que sean parte de la mejor institución que tiene Colombia. Es un organismo que nos enseña los valores, a apreciar la familia, el trabajo en equipo. Y les recomiendo que si van a hacer parte del Ejército, es porque aman el camuflado y porque aman estar acá, y bienvenidos todos los que quieran venir”, concluye la teniente Rojas.