La cadena de comida rápida Kentucky Fried Chicken (KFC) dejará de vender pollo tratado con ciertos antibióticos en sus más de 4.000 restaurantes de EEUU, informó la empresa.
La cadena de restaurantes anunció que está en negociaciones con aproximadamente unas 2.000 granjas del país norteamericano para que dejen de utilizar antibióticos para humanos en la crianza de las aves, y que se espera que este cambio se complete para finales de año.
Sin embargo, la empresa informó que se seguirán utilizando antibióticos para animales. Los productores de carne suministran estos fármacos para hacer crecer a los animales más rápido e impedir que enfermen, práctica que se ha vuelto un problema de salud pública.
Las autoridades dicen que esto puede ocasionar que los gérmenes se vuelvan resistentes a los medicamentos y hacer que los antibióticos pierdan eficacia para curar algunas enfermedades en humanos.
Otras empresas rivales de KFC ya anunciaron planes para reducir su utilización de pollos criados con antibióticos.
KFC, propiedad de Yum Brands Inc, con sede en Louisville (Kentucky, EEUU), afirmó que también está en proceso de eliminar el uso de colorantes y sabores artificiales de ciertos productos de su menú para finales del 2018.