En las calles de Niquía, al norte de Medellín, se registró el indignante caso. Dos jóvenes se movilizaban en una motocicleta a alta velocidad mientras el parrillero halaba de la correa a perro.
Unas ciudadanas se percataron del hecho y empezaron a tomar fotografías y videos. En las imágenes que circulan en redes sociales se escucha que la mujer que conduce se acerca y les dice: «descarados, ¡súbalo!». En ese instante los jóvenes en lugar de hacerle caso, por el contrario deciden acelerar y el perro se vio obligado a correr.
En ese momento la acompañante decide anotar el número de placa de la moto para poder denunciar el hecho de maltrato animal del que era víctima el canino. Mientras tanto la conductora pitaba intentando llamar la atención de los demás ciudadanos que estaban en el lugar, pero la indiferencia ganó.
Hasta el momento se desconoce si las autoridades tomarán medidas por este hecho.