Medellín es una ciudad que está cerca de los 1550 metros de altitud, en un valle rodeado de montañas que hacia el sur presenta un entrecruzamiento y una barrera mecánica que impide la expulsión de los contaminantes.
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“Tenemos unos vientos que soplan en algunos sentidos de norte a sur y son de muy baja velocidad. Además tenemos un proceso natural que se da en nuestra ciudad que es la inversión térmica, un proceso que impide que esos contaminantes que se generan durante el día, durante la noche puedan en un ascenso vertical, salir a la atmósfera y ser expulsados por los vientos alisios” afirmó Oscar Hoyos Giraldo, Secretario de Medio Ambiente de Medellín.
La reciente contingencia ambiental se presentó justamente por ese fenómeno ya que los contaminantes quedaron atrapados por la baja nubosidad.
En la ciudad hay ubicadas 8 redes de monitoreo y todas estuvieron en rojo, por encima de los parámetros permitidos a nivel nacional y por la Organización Mundial de la Salud, OMS.
“El fenómeno de la inversión térmica se presenta normalmente en esta época del año, pero se agravó por el tema del fenómeno de El Niño. La temporada de lluvias que en esta época debería llegar, se ha demorado un poco y eso repercutió en que hubiera una estabilidad atmosférica que no generaba los vientos verticales ascendentes” indicó Hoyos.
En la ciudad existen unos índices de contaminantes que están clasificados en dos: fuentes fijas y unas fuentes móviles; las fuentes fijas son un 20% de los contaminantes y las fuentes móviles un 80%.
“Cuando se presentó la contingencia ambiental, el Alcalde tomó las medidas enfocadas hacia las fuentes móviles, que eran en las que nosotros podíamos entrar a actuar más rápido y hacer más efectiva la intervención; por eso hubo una restricción por primera vez en la historia de 27 horas continuas sin carros, motos ni camiones. La medida fue exitosa porque posterior a esta se presentó una reducción ostensible en los contaminantes, reflejado en todas las redes de monitoreo” agregó Hoyos.
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El monitoreo mide el PM2.5 que son las partículas más nocivas para la salud, sin desconocer que las otras también lo son, como el óxido nitroso, el óxido de azufre o el CO2.
“Las condiciones particulares de la ciudad no son muy favorables, pero también tiene que quedar claro que esta no es una de las ciudades más contaminadas del mundo, que esta es una ciudad que quiere implementar muchos procesos, en el Plan de Desarrollo del Alcalde hay soluciones y medidas a mediano y a largo plazo” indicó el secretario.
Alejandro Rivas, jefe médico del Grupo Emi dijo que la contaminación afecta la salud de las personas, “los efectos nocivos repercuten en el aparato respiratorio, evidentemente vivimos del aire y del oxígeno que contiene el aire, entonces si esas partículas diminutas entran en el árbol respiratorio afectan y aumentan la incidencia de enfermedades respiratorias de cualquier tipo o agudizan las ya existentes”.
El Doctor Rivas dijo que las partículas no solamente son contaminantes sino que también son infecciosas y eso aumenta la presencia de enfermedades alérgicas e infecciosas de cualquier tipo.
“Si se vive en ciudades contaminadas se crean enfermedades nuevas o se agudizan las ya existentes y eso conlleva a acelerar el pronóstico de vida. Se debe controlar para que el ambiente sea más limpio, para que no terminemos siendo curativos sino preventivos” puntualizó el Doctor Rivas.
La contaminación no sólo es el carbón que emite la combustión, sino que también existen partículas provenientes de otros continentes, como el caso de las partículas de polvo que llegan del desierto del Sahara a través de los vientos alisios y los contaminantes que generan las industrias.
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