Es un tema que representa una alta preocupación, especialmente porque se presentaron 278 casos en niñas de 10 a 14 años de edad, una cifra que registra 4 casos más que en el 2014.
“Ningún embarazo de 10 a 14 años es admisible, es un caso de abuso sexual o violencia cualquier embarazo en menores de 14 años, nuestra meta es lograr cero casos. No es factible que todavía tengamos embarazos en ese grupo de edad” afirmó Luz Marina Peláez, médica profesional especializada de la Secretaría de Salud de Medellín.
En el rango de edad de 15 a 19 años se registraron 6266 embarazos, un 19.9% del total de embarazos durante el 2015.
En ese grupo de edad un embarazo representa “una problemática que genera dificultades sociales, económicas para la persona, la familia y la comunidad; porque se quedan en un círculo, generalmente de pobreza. Hay mayores dificultades para acceso a la educación por el cuidado de los hijos, no es porque se cierren las puertas, porque es una de las cosas que se han divulgado, que las adolescentes sigan sus estudios” indicó Peláez.
Las comunas en las que mayor cantidad de casos se presentan en la capital antioqueña, en el grupo de 10 a 14 años son: Santa Cruz, San Cristóbal, El Popular, Aranjuez y Altavista. En el caso de las niñas de 15 a 19 años son: El Popular, Santa Cruz, Palomitas, Altavista y San Antonio.
“Las causas son muchas, en primer lugar, el entorno familiar, porque se repiten los embarazos en las hijas de las mujeres que han sido madres adolescentes; es un ciclo repetitivo que se ha visto en la ciudad. Muchas veces también sucede con la prima, la amiga, la hermana y se van repitiendo. Por otro lado, las dificultades de acceso a empleos adecuados, a falta de educación, falta de un reconocimiento claro de unos derechos sexuales y reproductivos” indicó la funcionaria.
Las adolescentes cuentan con asesoría permanente para el uso adecuando de métodos de planificación de manera libre, voluntaria y gratuita. Sin embargo, aún falta mayor conocimiento de los derechos sexuales y reproductivos y educación clara desde las mismas instituciones educativas.
Adicionalmente, “existen dificultades por la misma violencia, las bandas, las fronteras invisibles; todo lo que existe en diversos sectores; que muchas jóvenes, han dicho, que quieren embarazarse de los líderes de las mismas comunidades de los sectores de mayor violencia” afirmó Peláez.
La problemática definitivamente no es solamente de salud, debe existir un compromiso de todos los sectores de la sociedad, desde las políticas sociales, educativas y económicas.
“El embarazo en adolescentes es una problemática bastante delicada en la ciudad y es importante abordar el tema de la prevención y la promoción de los derechos, pero de la prevención a temprana edad. Está demostrado que un embarazo adolescente a temprana edad obstaculiza el desarrollo y el avance de las jóvenes, incluso, se calcula que el atraso es más o menos de 10 años para poder volver a insertarse en todo el proceso social, económico y productivo” afirmó Gloria Luz Gómez, Secretaria de las Mujeres.
Además, indicó la Secretaria, que el embarazo no se puede quedar sólo como una carga para las mujeres, sino que “se debe prevenir en los dos, podemos promover el libre desarrollo de la sexualidad y el ejercicio de la sexualidad, pero con seguridad, con responsabilidad, con compromiso de autocuidado tanto de los jóvenes como de las jóvenes” puntualizó.
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