Sobre cómo estar hidratado: El Instituto de Medicina de Estados Unidos y Canadá (IOM por sus siglas en inglés), define los requerimientos mínimos de líquido, para un adulto sano, de 3 litros al día para hombres y 2 litros para mujeres. Sin embargo, esto puede variar según el clima, el nivel de actividad física y la altura, entre otros factores. El 80% del consumo se obtiene de cualquier bebida y el 20% restante de alimentos como frutas y vegetales.La forma de hidratarse correctamente es hacerlo progresivamente a lo largo del día, no es aconsejable hacerlo todo en un solo momento. Cuando se ingiere líquido poco a poco, el organismo lo asimila mejor y lo puede transportar a su ritmo por todo el cuerpo, mientras que si se hace una sola ingesta se satura y debe expulsar mucho del líquido por la orina.
Debe saber que la hidratación es tan importante como una buena nutrición. Todas las bebidas, no solamente el agua, sirven para hidratar al cuerpo.
Los adultos mayores necesitan los mismos nutrientes como proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales que los jóvenes, pero en cantidades diferentes.
Usted debe saber que se trata de tener un plan de alimentación especialmente equilibrado, en parte porque las personas mayores tienen en general menos apetito y, por eso, lo que ingieran debe responder a una óptima combinación de principios nutritivos.
Es por eso que un buen desayuno debe incluir todos los nutrientes que el cuerpo necesita a primera hora de la mañana. Entonces, no debería faltar:
Comer de manera consciente
Sin embargo no se trata solo de comer ciertas cosas, aquí entra en juego la alimentación consciente. La nutricionista Mayra García, asegura que “comer de manera apresurada constituye un riesgo para la salud, deteriora el funcionamiento del aparato digestivo y la asimilación de los alimentos por parte del organismo. Además, provocará una digestión pesada que resultará en un estado de adormecimiento”.
La técnica de la alimentación consciente se basa en vivir el momento y no ver la acción que se realice como algo de rigor o de obligación. La práctica de la atención plena, es reconocida como una manera de reducir el estrés, aumentar la autoconciencia, prevenir enfermedades crónicas y mejorar el bienestar general.
“Esta práctica ayuda a crear un balance en lo que se come, controlar las porciones y ver que hay muchas formas de disfrutar todos los alimentos sin restricciones”, añadió García.
Aunque a esa edad se debe ser más riguroso a la hora de alimentarse, no se asuste, esto no significa que deba tomar tres horas para estar atento a los alimentos que ingiere.
Alimentación en General
La nutricionista Consuelo Pardo asegura que «No hay alimentos buenos o malos, solo dietas mal balanceadas. Cada uno de los alimentos que integran los diferentes grupos tiene una composición química y funcionan como un vehículo de nutrientes. Por esta razón, es de suma importancia que todos estén presentes en la alimentación diaria. Por ejemplo, las frutas son excelentes fuentes de vitaminas y antioxidantes, las carnes y lácteos de minerales y proteínas, y los cereales y tubérculos son fuentes de vitaminas y fibra. Incluso la grasa y el azúcar son importantes para el buen funcionamiento del cuerpo. El secreto está en la moderación”.
Pardo agrega que dentro de una alimentación balanceada es esencial mantener una correcta hidratación, ya que el líquido representa alrededor del 60% del peso corporal y participa en diferentes procesos como la digestión, respiración, absorción y excreción, ayuda a eliminar toxinas del cuerpo y mantiene la temperatura corporal.
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