Una de las principales preocupaciones de los padres es que sus hijos estén bien alimentados. ¿Qué les empaco en la lonchera? ¿Cómo logro que coman bien? Aunque parezca un desafío, a los chicos se les deben dar alimentos que les gusten, pero al tiempo los nutran y no los aburran. Así, y aunque su especialidad no sea la nutrición, hay formas de lograr una lonchera amorosa y balanceada con solo algunos consejos.
Lo primero es acabar con el mito de que lo nutritivo no es rico y que lo único que querrán sus hijos serán los productos altos en azúcar. Una alimentación balanceada incluye proteínas, pero sobre todo una gran presencia de carbohidratos para que ellos puedan responder con energía a todas las tareas del día, desde que se levantan con ganas de dormir más, pasando por la primera clase, el recreo con los amigos, hasta el regreso y las tareas que se hacen desde la casa.
La nutricionista Gabriela Donia afirmó a PUBLIMETRO que es muy importante “asegurarse que los niños, dependiendo de la edad escolar, consuman más o menos carbohidratos, según si son sedentarios o no”. Esto ayuda a evitar problemas de obesidad porque el azúcar que deben consumir no debe llevarlos a caer en excesos.
Pero, ¿cómo lograr diversión en la comida?
Donia agrega que “una buena estrategia para que los niños consuman alimentos saludables es buscar mezclarlos con otros ingredientes, porque hay que ser realistas un niño no elegirá por sí mismo la opción más adecuada y hay que buscar otras alternativas y ser ingeniosos”.
Eso implica armar una lonchera con alimentos energéticos, los cuales llamen la atención de los pequeños y al tiempo los nutran. Lo importante siempre estará dado por lograr una lonchera balanceada y por eso hay que buscar acompañar la lonchera con una fruta o con algún invento creativo de verduras (burritos, hamburguesas, sánduches).
¿En qué momento deberían ir estos alimentos que les proporcionan energía?
La lonchera es fundamental porque normalmente los chicos la consumen en los descansos, cuando están en temporada escolar. Es decir, el tiempo de estudio es el momento en que más energía necesitan para entregar el 100 % de ellos y por eso es necesario que cuenten con una lonchera llena de alimentos muy completos (además porque allí en el colegio, los padres no pueden estar vigilantes).
Esto significa que lo que se les empaca a los hijos para el colegio hay que planearlo muy bien, para variar durante cada semana y que ellos sientan el amor de padres en cada lonchera. No lo olvide, cada comida del día es importante y se pueden incluir alimentos energéticos que amen los chicos y al tiempo sumarles frutas y verduras para lograr una alimentación balanceada.
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