La idea de Sin darnos cuenta nació en medio de las grandes manifestaciones de finales del año pasado…
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Este movimiento nos agarra en una gira por Europa y no podemos estar para estas enormes y representativas marchas. Esto hizo que nos conectáramos, más que nunca, con todas las causas que se estaban moviendo. Así que decidimos escribir esta canción basados en esa experiencia, y en las vivencias de un viaje que hicimos con las Naciones Unidas a Córdoba y Putumayo conociendo personas muy vulneradas por la violencia y el desplazamiento.
Desde ese momento nos comprometimos a que parte del nuevo disco debía tener esa carga emocional de nuestra transformación como sociedad y humanidad, y escribimos una letra en nombre de esas personas que no tienen representación y que han sido silenciadas por defender los derechos de los demás.
En ese sentido, ¿de qué no nos estamos dando cuenta los colombianos?
De tantas cosas, pero una de ellas lo dice la canción: «que defender lo natural es altamente mortal». Y es que hay personas que por evitar una tala o la muerte de una especie terminan silenciadas. Tampoco nos estamos dando cuenta que aquí hablamos más cifras que de rostros, y somos uno de los países con el mayor número de líderes sociales y ambientales asesinados. Además, no hemos caído en cuenta de que tenemos un estilo de vida completamente inequitativo, con personas que a lo largo y ancho de Colombia se están muriendo de hambre. Y la lista es más larga…
La canción toca fibras, pero el video aún más…
Es que el video tiene las imágenes de ese viaje, contando la experiencia a través de los rostros, de las sonrisas y de las expresiones de aquellas personas que realmente han vivido este conflicto. La verdad fue un gusto inmenso poder compartir con ellos.
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«Era un compromiso. En Sin darnos cuenta teníamos que decir: no más muertes, cambiemos nuestra historia y no perdamos la memoria», Juan Diego Moreno.
Viajando un poco en el tiempo, ¿cómo es que un grupo de pelados bogotanos decide crear un proyecto que mezcla géneros como el rock y la carranga?
Varias razones, aunque considero que hay dos principales. La primera tiene que ver con los genes, porque hay mucho de boyacenses en nosotros. Mi raíz, por parte de madre y padre viene de Tibasosa, Sáchica, y muchos lugares más. Y bueno, si hablamos del resto del grupo podemos sumar aún más: Gámeza, Duitama, Paipa, etc.
La segunda razón tiene que ver con la universidad, ya que hicimos parte de facultades de música en las que habían procesos de resignificación de las músicas colombianas, buscando darles un posicionamiento académico. Y es que antes la música colombiana no era considerada importante dentro de la academia. Yo además de estudiante también fui profesor, y por todos los lados sentí que era necesario incluirla, pero también, llevarla más allá, para que las nuevas generaciones pudieran tener contacto con sus raíces.
Y luego de presentarse ante el mundo, ¿cómo fue la aceptación en su natal Bogotá y en Colombia?
Uno diría que la primera región en escucharnos fue Boyacá, pero no fue así. La primera fue Bogotá, la segunda Medellín y en tercer lugar sí estuvieron algunas zonas de Boyacá. Yo creo que Los Rolling Ruanas han sido tomados como músicas del mundo, e independientes, porque tienen elementos del rock y del folclor latinoamericano. Y es que al interior de nuestra música te puedes encontrar con una samba, con un bolero, y hasta con un poco de ranchera. Creo que por eso las grandes ciudades consumen esta música y les gusta.
Y bueno, esto ha sido dentro, pero afuera también hemos podido llegar a otros públicos. En 2018 hicimos una gira por Estados Unidos y nos fue muy bien, sobre todo en New York y en Minneapolis. Y el año pasado también estuvimos en Sevilla, París, Barcelona, y más, teniendo los recintos completamente llenos.
Volviendo al aquí y ahora, ¿cómo les ha ido en esta cuarentena?
La verdad es que hemos contado con la fortuna de hacer dos presentaciones virtuales. Y sin duda, eso nos ha devuelto la vida en medio de la pandemia, porque pararnos en el escenario, para la gente, da un aire que no te alcanzas a imaginar. Íbamos a lanzar un disco en mayo, pero dadas las circunstancias decidimos detenerlo un momento y trabajar con las canciones que hemos escrito durante la cuarentena. Por ahora el álbum tendrá que esperar, pero estamos en una muy buena producción de sencillos.
