En medio de la pandemia y la cuarentena por el coronavirus, los canales colombianos tuvieron que repetir muchas de sus producciones por falta de contenido nuevo. Sin embargo, hace unas semanas RCN les dio una sorpresa a sus televidentes con el estreno de Verdad oculta, protagonizada por Verónica Orozco y Rodrigo Candamil.
Si aún no se ha conectado con ella, le contamos que esta producción centra su historia en la coronel Diana Manrique (Verónica), quien después de infiltrarse y capturar al narcotraficante ‘Don Mario’, quiere hacer una pausa para recuperar su matrimonio. Sin embargo, las malas noticias no demoran en aparecer cuando su jefe, el general Tapias, le encomienda desmantelar las bandas criminales que han entrado en guerra pues quieren heredar el control y el territorio que dejó Don Mario.
«Hacer a Diana fue hermoso porque la televisión necesita más personajes como ella, que sigue adelante en una carrera que es de hombres. Ella es una mujer que no se derrumba ante los comentarios de sus compañeros, quienes siempre la están poniendo a prueba, y para rematar, cuestionan su inteligencia y hasta cómo llegó a ser coronel», le contó Verónica a Publimetro.
Sin embargo, los problemas para Diana no terminarán allí. Y es que no solo se enfrentará a los criminales más peligrosos y a sus compañeros, sino que también tendrá que trabajar con quien fue su novio en los años de la academia. Un amor que no ha podido olvidar.
«De cierta manera al mayor Raúl Ceballos le encanta trabajar con Diana porque la quiere poner a prueba, porque realmente quiere comprobar si pudo seguir adelante sin él. Y también hace todo esto porque quiere recuperar su amor. Intentará hacerlo discretamente, pero no se quedará quieto en ningún momento», aseguró Rodrigo Candamil, quien le da vida a este personaje.
La historia tiene como base lo relatado por Germán Castro Caycedo en su libro Una verdad oscura. En el texto Castro Caycedo lleva a los lectores a un mundo de suspenso, criminalidad y espionaje. Y todo esto ocurre en Colombia.
«La verdad es que esta producción nos enfrentó a toda clase de retos, desde el primer día de grabación. Y es que tuvimos que ponernos en los pantalones de estos expertos en inteligencia que literalmente son unos genios, porque saben actuar, saben tratar a las personas y para rematar, son unos tesos con diferentes herramientas», contó Verónica.
Por su parte, Rodrigo Candamil agregó lo siguiente: «Creo que justamente la parte de la actuación me llamó mucho la atención. Y es que, sin estar en la misma profesión, tanto ellos como nosotros hemos aprendido el bello arte de ponerse en los zapatos de alguien más. Pero sin duda, su labor es mucho más grande, porque mientras nosotros lo hacemos para la televisión, ellos lo hacen para capturar a los criminales, poniendo su vida en riesgo».