Hablemos de Pájaros de verano, que podría llegar a los Óscar, ¿qué fue lo más grato de interpretar a Zaida?
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Toda la experiencia que vivimos en La Guajira, fueron cuatro meses de una inmersión muy intensa, de mucho trabajo de investigación y de observación, de vivir en una ranchería y de acostumbrar el oído al wayuunaiki, de aprenderlo y trabajar las escenas y el texto. En este lugar tan mágico que es la Guajira colombiana muchos sabemos algo de sus costumbres, pero otra cosa es vivirla, conocer sus costumbres, que nos contaran de sus tradiciones y cómo se han ido perdiendo. Así que, el mejor recuerdo que me deja Pájaros de verano es haber vivido la Guajira tan profundamente y el haber reconocido esa cultura como lo grandiosa que es. Está llena de mitos, magia, historias, tradiciones que ojalá no se pierdan y todos podamos llegar a conocer como colombianos.
Luego de tanta preparación para Pájaros de verano, ¿qué idea se lleva de las mujeres wayúu?
Me llevo algo que menciona la película, que es su honra y su palabra. Es una cultura con mucha dignidad que suele poner mucho peso sobre el honor, la familia, el clan. Lo que es ser leal a los principios. Para ellos la palabra tiene un valor especial porque la cultura de ellos es básicamente oral. El wayuunaiki no es una lengua fija sino que cambia según la región. Muchas personas pueden llamarle distinto a un mismo objeto. La gran tragedia de la película, en parte, es haber traicionado ese aspecto de la cultura wayúu. De las mujeres también me llevo su aspecto de creadoras, tal como se ve en sus tejidos y en todo el proceso de pasar su conocimiento y sabiduría a sus hijas. Hoy en día a las niñas wayúu les enseñan a tejer cuando son pequeñas, luego les enseñan cómo funciona la ranchería y van haciendo que su cultura tenga más vida a largo plazo.
Ha hecho varios papeles relacionados con episodios difíciles de la historia del país, ¿cómo le ha ayudado la actuación para tener otra mirada de lo que es Colombia?
Creo que la actuación es la forma más maravillosa que he encontrado, no solo de descubrirme a mí misma, sino de contar episodios importantes y dolorosos de la historia del país. Eso me gusta, pues cada personaje me lleva a una zona distinta, a un personaje distinto, a una realidad, un contexto y un dialecto distinto. Siempre he sido muy curiosa, pero sin duda este trabajo me ha permitido descubrir Colombia con lo compleja y diversa que es. Y lo diversas que somos las mujeres colombianas, no tiene nada que ver Lady, de La vendedora de rosas, con Zaida, de Pájaros de verano. Las dos tienen en común que son mujeres fuertes que están luchando contra todas las cosas que se les presentan en contra, pero son totalmente distintas. Agradezco a la actuación el haberme acercado a estos mundos que de otra forma habría sido difícil conocer.
Para muchos fue una grata sorpresa que consiguiera el papel en Terminator 2, ¿qué fue lo más duro de ese proceso?
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La última etapa. Al comienzo mandé el cásting sin pretenciones porque era muy remota la posibilidad de que pasara. Pero en los últimos meses, que quedábamos menos chicas y nos llevaron a hacer varias pruebas, fueron muy duros, especialmente antes de recibir la noticia. Estaba un poco a la deriva porque no sabía qué hacer con mi vida y no podía comprometerme con nada más, eso me causó mucha ansiedad y nervios, pero valió la pena. Es una gran bendición para mí, un regalo gigante. Ahora estoy rodándolo, ha sido un trabajo muy arduo pero estoy muy contenta de estar aprendiendo cada día.
Pasó de filmar en la Guajira a grabar en Hungría, ¿cómo es el trabajo con la industria colombiana versus la industria de Hollywood?
Con el tema de la globalización y teniendo en cuenta que Colombia está en un momento muy importante para la producción audiovisual, hay grandes producciones de muchos países yendo a producir en Colombia y realmente hemos empezado a fortalecer una industria que cada vez es más competitiva a nivel mundial. Eso ha hecho que las diferencias cada vez sean menores entre producciones de Hollywood y Colombia, así nosotros mismos no lo podamos creer. Ha sido una de las sorpresas: en Colombia hemos avanzado a pasos agigantados con todo el tema del cual en parte hemos empujado mucho los actores del Sindicato de actores y las condiciones laborales, todo eso ha hecho que estemos en un nivel bastante decente. Obviamente hay mil cosas en las que Hollywood nos lleva años luz, pero son una industria con muchos más años que nosotros y que tiene cada una de las partes mucho más especializada. Acá encuentras personas que llevan muchos años haciendo una sola labor específica, como el maquillaje de efectos especiales. Tienen una especialización muy alta y tienen mucha atención al detalle con cosas básicas que afectan positivamente el producto final. Pero me encuentro muy orgullosa de la industria del cine colombiano, creo que vamos a seguir creciendo y seguiremos aprendiendo de los procesos, pero estamos muy bien parados. Seguramente vendrán muy buenas cosas.
Terminator es una película ochentera, ¿estaba entre sus favoritas de la época?
Cuando nací la película estaba saliendo entonces no la vi en cine, pero por mi hermana, que es mayor que yo, sí tenía esa conexión con la cultura de los ochenta entonces yo tenía también esa referencia de Terminator. Finalmente la película es un referente mundial en la historia del cine. Cuando empecé el proceso de cásting volví a ver la primera y la segunda, esta será la continuación de esas dos, y claramente hoy en día esos efectos no tienen nada que ver con los efectos que se han hecho en ese nivel, pero sigue siendo relevante y actual, es una problemática vigente; todo el tema de las máquinas, los celulares, el GPS. Estamos realmente controlados por la tecnología. James Cameron es un visionario y estoy orgullosa de ser parte de esta entrega.
¿Cuál cree que será el siguiente paso en su carrera?
Estoy intentando ir paso por paso, trato de no preocuparme ni tener demasiadas expectativas. Estoy viviendo el presente y me concentro en el rodaje de Terminator 6. Aparezco en todas las escenas, trabajo todos los días, es bastante exigente. Ya hay momentos de cansancio, pero obviamente estoy muy feliz y agradecida con todo lo que estoy aprendiendo. He tenido un apoyo muy grande, pero no deja de ser un trabajo bastante exigente a nivel físico, psicológico, emocional, es bien difícil. He estado viendo propuestas y leyendo guiones pero estoy concentrada en este rodaje y ocupada también con temas de postproducción. Busco algo que enriquezca mi carrera y que ojalá sea un tema de talla internacional para seguir con este camino y estas puertas que se han abierto para mostrar más talento como el que tenemos en Colombia.
