A sus 50 años, la actriz mexicana Salma Hayek (quien ha participado en diferentes producciones cinematográficas como El gato con botas, Bandidas o Niños grandes), vuelve a la pantalla grande con Cómo ser un latin lover, película que busca romper con los estereotipos del clásico gigoló norteamericano, en la que la nominada al Premio Óscar actúa junto a Eugenio Derbez, Rachel Welch, Kristine Bell y Rob Lowe, entre otros.
“Un latin lover es un seductor de origen latino, pero creo que ese término también incluye a alguien que es romántico y alguien que tiene el entusiasmo de complacer a las mujeres o a los hombres, uno nunca sabe”, asegura la artista.
El filme, que se estrenará el 22 de junio en las salas de cine del país, cuenta la historia de Máximo (interpretado Eugenio Derbez), quien fue educado como cualquier otro joven, pero con un pequeño detalle: él soñaba con no tener que trabajar ni esforzarse por conseguir nada en la vida. Por esa razón –y después de hacer una carrera como seductor de mujeres ricas y mayores– se casa con una mujer millonaria pero mayor que él, que tras 25 años de matrimonio lo cambia por un hombre más joven y simpático que se dedica a vender automóviles.
Cuando su vida de lujos se viene al piso, Máximo se ve obligado a dejar su mansión y a buscar a su hermana menor, Sara (Salma Hayek), quien tiene un pequeño hijo de 10 años, Hugo (Raphael Alejandro). Cuando se presenta la oportunidad de ayudar a su sobrino a llamar la atención de una compañera de estudios, Máximo volverá a usar sus artimañas para conquistar la atención de Celeste (Raquel Welch), la abuela multimillonaria de la niña. Armado de sus mejores tácticas de galán, se lanza a recuperar su vida de privilegios.
“Lo que amo de mi personaje es que no se da por vencido. Sara es una arquitecta y sigue trabajando de la misma forma en que lo ha hecho por años. Ella es como muchas mujeres que son capaces de lograr las cosas sin importar si tienen o no trabajo. Ella, aunque a veces se frustra con su situación, no deja ir su sueño”, cuenta Salma. “Sara también es una mujer muy familiar, se aferra a los suyos y tampoco se da por vencida por su hermano, aunque fue abandonada por él”, agrega.
Sobre compartir el set con Derbez, quien conquistó a América Latina con su personaje de Valentín Bravo en No se aceptan devoluciones (2013), Salma asegura que no hubo nadie más apropiado que él para interpretar al latin lover.
“Para mi Eugenio siempre ha sido como un hermano. La producción no puedo haber pensado en una mejor historia que esta para que él y yo la hiciéramos juntos. Además, hay muy pocas películas que tienen la relación entre hermanos como una parte fuerte dentro de la historia, y no hay mejor energía de ‘hermanos’ que la que tenemos los dos. El rodaje fue muy bonito y también muy divertido, así que esa química funcionó perfecto para la película”, confiesa la mexicana, quien considera a un latin lover en la vida real a su esposo, el empresario francés François-Henri Pinault. “Él es mi latin lover, porque los franceses también son latinos, pero a este lo tengo exclusivo”, señala.
Destacado
El actor que interpreta a Máximo joven es el verdadero hijo de Eugenio Derbez, Vadhir Derbez, y el camarero de la fiesta es también interpretado a su vez por el hijo de Eugenio, José Eduardo. Ambos han sido actores en México desde hace varios años.
Esta es la primera colaboración en pantalla de Eugenio Derbez y Salma Hayek. También es el primer papel protagónico de Derbez en inglés, sin embargo, tuvo que subir 10 kilos para el personaje.
¡Más noticias de Cultura y Entretenimiento AQUÍ!