Casos de violencia intrafamiliar, microtráfico, maltrato animal, hurto de vehículos y riñas callejeras han sido apoyados por el helicóptero Bell 407 con el que la Policía Nacional entró a reforzar la seguridad de Cali desde el 5 de julio del 2017. En el aire, los uniformados se apoyan en una potente cámara de video y radios de comunicación para hacer un trabajo en equipo con las patrullas en tierra.
Según las cifras, en los primeros tres meses de funcionamiento de ‘el halcón’ se han atendido más de 571 casos que han dejado como resultado 92 capturas, incautación de 6 armas de fuego, 44 armas blancas y 3776 gramos de marihuana, y recuperación de 6 vehículos. Sin embargo, uno de los resultados más llamativos es lo que logra el helicóptero con su sola presencia en los sitos de alta criminalidad.
“Desde las cámaras observamos que, cuando llega el helicóptero, los bandidos se esconden en las casas y quienes están vendiendo alucinógenos inmediatamente se van. Hay un impacto desde el aire solo estando ahí. Gracias a la tecnología que tenemos podemos ver los rasgos físicos de las personas y placas de vehículos, lo que nos permite hacer seguimiento”, asegura el mayor Carlos Valencia, piloto del Bell 407.
En los vuelos diurnos, a bordo de ‘el halcón’ van tres miembros de la Policía. En la noche, cuatro. El helicóptero tarda menos de cinco minutos en atravesar la ciudad de norte a sur.
Cada semana se realizan comités estratégicos para identificar los puntos de la ciudad en los que se han presentado más delitos de acuerdo al día y al horario con el fin de programan los vuelos. Con base en los índices de criminalidad, los puntos que requieren mayor patrullaje son el Distrito de Aguablanca, Siloé y Meléndez, sobre todo en horarios de mediodía y los fines de semana.
Aunque el promedio de vuelo diario es de cinco horas, el helicóptero y su tripulación están disponibles día y noche para atender cualquier llamado de emergencia desde el Centro Automático de Despacho (CAD) de la Policía. El pasado 26 de septiembre, por ejemplo, se apoyó desde el aire la captura de 11 sujetos sindicados de extorsión gracias a un trabajo que venía adelantando el Gaula.
Labores de persecución que se tornan difíciles desde las calles cuentan con el acompañamiento de los uniformados a bordo de ‘el halcón’, que con su visión panorámica y su posibilidad de detectar el calor disminuye las posibilidades de perder de vista un objetivo. “A veces los delincuentes se meten por matorrales o se suben a los techos. Nosotros les hacemos el seguimiento desde el aire y les vamos indicando a las patrullas a través de los radios para que logren capturarlos”, cuenta el intendente Óscar Aristizábal, operador de equipos.
Las imágenes captadas por la cámara del helicóptero quedan grabadas en un disco duro y sirven como material probatorio de los operativos.
Lo que muestran las cifras
A pesar de los logros que se han tenido en materia de seguridad y que han llevado a que, en el 2017, Cali tenga la cifra más baja de homicidios de los últimos 25 años, otros delitos como el hurto a personas y el robo de celulares continúan en alza. En los primeros seis meses del año, el hurto a personas incrementó un 13,4% con respecto al mismo periodo del 2016. Por su parte, el robo de celulares creció un 43,7%.
En los ciudadanos, las percepciones están divididas. Mientras unos se sienten protegidos con el helicóptero volando todos los días y confían en que esta estrategia sirve para reforzar la seguridad, otros consideran que se trata de un gasto innecesario. “No creo en el plan de seguridad que se implementa en Cali. Siguen improvisando y la criminalidad continúa en alza. El helicóptero es un gasto innecesario y una herramienta mal empleada, pues los robos han aumentado”, asegura Andrés Uzuga, licenciado en arte teatral.
De acuerdo con el mayor Valencia, a la línea 123 de la Policía llaman de seguido los ciudadanos a felicitar a la institución por la labor que se está haciendo con ‘el halcón’. “Las personas se sienten a gusto cada vez que hacemos un patrullaje, a veces nos saludan desde tierra y logramos verlos en la cámara. Los fines de semana, cuando suben al cerro de Las tres cruces, hacemos acompañamiento desde las 6:00 a.m. y les damos voz de aliento, les ponemos música y enviamos mensajes sobre el Código de Policía para que lo tengan en cuenta”, añade el piloto.
Cada hora de vuelo del helicóptero Bell 407 cuesta cerca de 1600 dólares, valor que cubre la Policía Nacional.